Allá voy Sarmiento…


Y… es el gran maestro. ¿Sarmiento? No, Temperley que ayer le ganó por 1-0 a Estudiantes de Caseros el partido pendiente de la 14ta fecha y quedó a sólo dos puntos del equipo de Junín que sigue siendo el líder de la Primera B, con un partido más.

Bazán Vera, de tiro penal, le dio la victoria al Cele a los 36 minutos del primer tiempo. Luego, los dirigidos por Stagliano se cerraron bien atrás y manejaron bien el trámite del encuentro aprovechando la ventaja en el marcador para vencer a un Pincha que no se le cayeron muchas ideas y se fue insultado por su gente.

Stagliano hizo una apuesta bien fuerte para el primer tiempo: armó una falsa línea de tres que tuvo a Julián Cano por la derecha (por naturaleza un volante) y metió una línea de cinco volantes con Juan Manuel Quevedo suelto para asistir a Nicolás Falczuk y Daniel Bazán Vera. Sin embargo, en los primeros minutos hubo mucha pelota dividida y poco fútbol.

Estudiantes arrimó algo de peligro con la movilidad de Cristian Yassogna o los desbordes de Facundo Lemmo –lo más interesante del local- pero nunca tuvo mucha profundidad. Un remate del ex Brown de Adrogué a los 24’ y un tiro del zurdo a los 42’ fue lo único que mostró el dueño de casa en la primera etapa.

Y en una de las pocas que tuvo el equipo que dirige Vicente Stagliano hizo la diferencia: una guapeada del pibe Emanuel Carreira obligó a Lemmo a cometer falta dentro del área y el árbitro Julio Barraza cobró la pena máxima que el Indio cambió por el 1-0 con un remate fuerte al palo derecho de Monasterio.

Después, el Cele casi marca el segundo con un tiro del Indio a los 40’ –tras buena asistencia de Quevedo- y a los 45’ con un cabezazo de Quiñónez que se desvió en el ex San Lorenzo y tapó el arquero César Monasterio.

En el segundo tiempo no pasó casi nada. Estudiantes insinuó al minuto con un cabezazo de Lemmo que dio en el travesaño pero se quedó sólo en eso. Y más allá de que intentó, más con ímpetu que con fútbol, encontró a Temperley siempre bien parado.

Falczuk tuvo la chance de liquidar la historia a los 11’ cuando definió mal mano a mano tras una buena habilitación de Bazán Vera y más tarde fue reemplazado por el defensor Federico García. Con él y con el ingreso de Nicolás Guevara por Quevedo el Tano armó un 4-4-2 bien compacto que no le dio lugar a la reacción del local.

Sólo hubo tiempo para que, en el descuento, Barraza expulsara a García y Lemmo luego de una jugada controvertida en la que el zaguero le metió un empujón. Honor y gratitud, al gran maestro. Sí, a este Temperley que amenaza cada vez más fuerte con arrebatarle la punta al buen equipo de Sarmiento de Junín.