El Tribunal de Casación Penal bonaerense otorgó el beneficio de arresto domiciliario al odontólogo platense Ricardo Barreda, que en 1992 mató a su esposa, su suegra y sus dos hijas, informó una fuente judicial.
Los jueces de la Sala I del Tribunal tuvieron en cuenta para adoptar esa resolución, la edad del cuádruple homicida, 72 años, su conducta "excelente" dentro del penal y el tiempo que lleva preso.
El Tribunal de Casación ordenó a la Cámara Penal de La Plata que haga efectivo ese beneficio, por lo que se estima que ésta cámara solicitará informes al Servicio Penitenciario bonaerense acerca de las condiciones psíquicas del odontólogo para acceder a la libertad.
Si el informe es favorable, como se estima, el cuádruple homicida saldría en libertad desde el penal de Gorina, en La Plata, donde cumple su condena a reclusión perpetua. Dos de los jueces de la Sala I de Casación provincial consideraron que a Barreda no le da el cómputo de años en prisión para acceder a la libertad condicional; y el tercer magistrado, Benjamín Sal Llargués, propuso que independientemente de esa circunstancia se contemplara la posibilidad de que el condenado, debido a su edad, acceda al arresto domiciliario.
La propuesta fue aceptada finalmente por sus pares, precisó una fuente judicial. Barreda fue condenado a reclusión perpetua en 1995 por los jueces de la Sala I de la Cámara Penal, Pedro Soria, Eduardo Hortel y María Rosentock, por asesinar el 15 de noviembre de 1992 a su esposa, Gladys Mac Donall; su suegra, Elena Arreche; y sus dos hijas, Adriana y Cecilia.