El Gobierno puso ayer en marcha un nuevo esquema de retenciones a las exportaciones de petróleo y combustibles, con el fin de garantizar la evolución de los precios internos y generar mayores recursos para el fisco.
A través de la resolución 394/07, anunciada por el ministro de Planificación, Julio De Vido; de Economía, Miguel Peirano; y el secretario de Energía, Daniel Cameron; el Ejecutivo determinó que las exportaciones de crudo seguirán tributando una alícuota del 45 por ciento mientras el precio internacional del barril se ubique entre 45 y 60,9 dólares.
En el caso de que supere los 60,9 dólares, como sucede actualmente -ayer el crudo WTI cerró por encima de 93 dólares-, la alícuota de exportación surgirá a través de un cálculo que contempla el precio internacional del producto y el valor de corte fijado por el Gobierno.
De esta forma, según los números que manejan las autoridades, al aplicar la nueva fórmula de retención el precio que recibirá el exportador será de 42 dólares por barril y la diferencia será la retención.
El nuevo esquema contempla también que si el valor del crudo retrocede por debajo de los 45 dólares, una situación lejana por el momento, se fijará en los próximos 90 días una nueva escala de alícuotas según el precio.
Un esquema similar se replicará para las exportaciones de combustibles, en especial las naftas, fuel oil, aceites y jet fuel, aunque en estos casos la Secretaría fijará en forma diaria el precio internacional correspondiente.
En un anexo de la resolución se especifica que el valor de corte para el petróleo es de 42 dólares el barril, mientras que para las naftas se ubicará en un rango de 39 y 78 dólares por barril; para el fuel entre 42 y 22 dólares y para los aceites lubricantes entre 121 y 174 dólares por barril.
Si repite el mismo esquema previsto para el crudo, y el valor internacional se ubica por encima del precio de referencia fijado para cada producto, los exportadores recibirán por sus exportaciones un monto equivalente al valor de corte dispuesto por el gobierno.
Hasta el momento, las exportaciones de naftas eran gravadas con una alícuota del 5 por ciento, mientras que en el caso de crudo la tasa trepa al 45 por ciento.
El decreto difundido ayer en Casa de Gobierno por De Vido y Peirano, luego de mantener una reunión con el presidente Néstor Kirchner, divide los productos derivados de petróleo en dos grupos, el primero -donde se encuentran los de mayor exportación como la nafta, aceites y el jet fuel- tiene valores de cortes diferentes y su valor de referencia será actualizado a diario por la Secretaría de Energía.
El segundo, compuesto entre otros por aceites de petróleo, gasolina, vaselina, parafina, coque de petróleo y brea de alquitrán tendrán la misma alícuota de exportación prevista para el crudo.
En los considerandos de la norma, el Palacio de Hacienda sostiene que "el Estado nacional debe procurar captar las rentas extraordinarias que se generen en diferentes sectores de actividad, en especial cuando se trata de recursos naturales no renovables".
El decreto, se publicará hoy en el Boletín Oficial y entrará en vigencia en 24 horas, asegura que "después de deducidos los derechos de exportación que por esta resolución se establece, la rentabilidad resultante será la adecuada para el giro normal de la actividad".
Durante la conferencia de prensa, Peirano justificó la medida bajo el argumento de que corresponde su aplicación "en función de la evolución de los precios internacionales para garantizar la evolución de los precios internos" de los combustibles.
El titular del Palacio de Hacienda dijo que la modificación en el esquema de retenciones del petróleo y sus derivados "tendrá una generación de recursos para el fisco" e insistió en que "los precios internacionales suben y tienen una dinámica ascendente y evidentemente las retenciones son un instrumento apto para garantizar la evolución de los precios internos".
De Vido, por su parte, dijo que "la medida apunta a proteger el mercado interno y fundamentalmente en el marco de la volatilidad que tiene el precio del petróleo y al alza, hay una renta que se potencia y por supuesto al ser un recurso propiedad del Estado Nacional y que por otro lado es no renovable, el Estado Nacional en salvaguarda del interés de todos, ha aplicado esta medida que lo que hace de alguna manera es retrotraer los precios al mes de julio".
"Esta es una medida más que razonable y apunta a proteger el mercado interno, la competitividad de la economía, salvaguardar el interés de todos los argentinos de un recurso que es de todos los argentinos y que además es no renovable", remarcó el titular de Planificación.