El ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Claudio Zin, encabezó ayer una jornada de “Violencia y Salud” que se llevó a cabo en el hospital Ana GoitÃa de Avellaneda, que se produjo en el marco de la conmemoración del DÃa internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer que se celebra hoy.
El encuentro también sirvió como homenaje a Ana GoitÃa, quien fuera esposa del ex gobernador y ex senador nacional Antonio Cafiero, en el hospital Materno Infantil que lleva su nombre, ubicado en Vicente López 747.
En el acto principal de la jornada, junto a Zin estuvieron el subsecretario de Coordinación y Atención de la Salud, Alejandro Collia; el director provincial de Hospitales, Sergio Alejandre; el titular de la cartera sanitaria de Avellaneda, Oscar Fariña; la presidente del Consejo Administrativo, Ana Cafiero y la coordinadora del programa provincial de Salud para la Prevención de la Violencia Familiar y Sexual, Magdalena Grau.
“Este programa intenta dar un lugar discreto en el que la mujer pueda ser atendida desde el punto de vista médico y donde encuentre el espacio para realizar la denuncia correspondiente”, aseguró Oscar Fariña.
El rango de edades de las mujeres, vÃctimas de violencia doméstica, que se atienden en el hospital materno infantil es de 25 a 40 años, pero en los últimos tiempos la brecha se amplió porque el porcentaje de adolescentes embarazadas golpeadas se incrementó. “En los primeros 6 meses de funcionamiento de las ComisarÃas de la Mujer aparecieron 2000 casos de mujeres que fueron vÃctimas de alguna clase de violencia doméstica”, precisó Ana Cafiero.
No obstante, en muchos otros casos las mujeres deciden callar para evitar la vergüenza social que conlleva el mote de “mujer golpeada”. Por este motivo, Zin remarcó que “es inaceptable la violencia que la sociedad y el Estado ejerce sobre la mujer”.
Esta jornada, que se extendió durante la tarde, es parte de un programa para prevenir la violencia doméstica que se lleva a cabo en la maternidad Ana GoitÃa, desde hace varios años y que está coordinado por la jefa del Servicio de PsiquiatrÃa, Maria Cristina Scarone.
Este plan aspira, entre otros puntos, a concientizar a los profesionales de la salud, para que además de evaluar la parte clÃnica de cada caso puedan ocuparse del aspecto social que existe detrás de cada mujer que es vÃctima de violencia.
“Las conclusiones de estas jornadas de no violencia, que se están realizando en Avellaneda, se deben convertir en normas legales”, finalizó Zin.