Un equipo integrado por efectivos de la Prefectura, la Policía y los bomberos empezaron un rastrillaje en el Riachuelo y en zonas aledañas en el marco de los operativos que se están realizando para intentar dar con el paradero de Erika Soriano, la mujer de embarazada de dos meses y medios que el sábado 21 desapareció luego de salir de su casa de Lanús para visitar a su madre, que reside en Villa Adelina.
El domingo, el comisario de la DDI de Lomas de Zamora, Fabián Tosso, ya había adelantado a Info Región que se realizaría este procedimiento, luego de que se hubiera realizado el fin de semana uno similar en los campos que tiene la familia del novio de la chica en Saladillo.
Allí, según explicó Tosso a este medio, se buscó "con perros preparados" para rastrear personas vivas y cadáveres, pero no se encontró nada.
En este marco, pareja de Érika, sigue siendo el pricipal sospechoso para su entorno, ya que fue el último que la vió, y según algunos testigos, habían tenido una discusión momentos antes de la que chica emprendiera el viaje a Villa Adelina.
Érika no se llevó los documentos, ni el celular, y según su familia nunca hubiese abandonado a su otra hija, Florencia, de 12 años.
"Estamos desesperados, ella no se fue", aseguró su hermana, Gisele, en diálogo con Info Región.