Pidieron la elevación a juicio de la causa por el crimen de Susana Leiva


La familia de Susana Leiva solicitó la elevación a juicio de la causa, a través del abogado Jorge Monastersky, pero aún resta que se realicen pericias psicológicas al único acusado por el crimen y papá de uno de los hijos de Susana, Alberto Ponce.

En mayo, Ponce había ampliado su declaración y dijo haber consumido cocaína antes de que ocurriera el crimen. Tras la confesión, el fiscal de la causa, Héctor Toneguzzo, solicitó nuevas pericias psicológicas y psiquiátricas, que hasta el momento “no fueron hechas”, precisó el letrado en diálogo con Info Región.

Desde los Tribunales de Lomas de Zamora manifestaron que se ha solicitado una prórroga en la investigación de la causa, que está caratulada como “homicidio agravado por el vínculo”.

Piden prisión perpetua. “Entendemos que las pruebas que están en el expediente son suficientes para elevar la causa a juicio. Para nosotros alcanza para llegar a la condena. La perpetua es lo que venimos solicitando por el tipo de delito”, sostuvo Monasterky. “No caben dudas que el autor es Ponce y que fue claro en su plan homicida. Su intención no era matarla sino someterla. Él tenía plena conciencia de lo que hacía. La actitud que tuvo después del hecho no era de una persona enferma sino que quería cubrir lo que había realizado. Habló cínicamente con los medios sobre la desaparición de su esposa”, culminó.

Tras el pedido de elevación a juicio de la causa, la defensa argumentó que se deberá esperar la resolución que tome la Justicia aunque no hay un tiempo estimativo para ello.

Drogas y pérdida de conocimiento. Ponce había manifestado que durante la noche del crimen había consumido cocaína lo que le produjo una pérdida de conocimiento; al despertar, se habría encontrado tirado sobre su mujer, que para ese momento ya estaba muerta.

Según declaró Ponce, la noche del 18 de julio del 2013 regresaba de trabajar en su auto cuando se detuvo en Banfield a comprar dos dosis de cocaína, droga que, según dijo, los dos consumían. Aspiró la primera dosis y continuó viaje. El relato responde a la declaración indagatoria del acusado, a la que tuvo acceso este medio.

Al llegar a su casa, habría encontrado a Susana tirada en la cama y alterada, que dio lugar a una discusión. En este momento, según sus declaraciones, Ponce le habría propuesto dejar la conversación para el día siguiente y, pese a ya estar sintiendo los efectos de la primera dosis, ingirió una segunda dosis de la droga. Luego de esto, habría vuelto a la habitación y se habría acostado de espaldas a Susana.

Según Ponce, en un momento ella, irritada por su negación a discutir, se habría tirado encima de él con un objeto en la mano y lo comenzó a agredir, mientras él intentaba soltarse. En este punto del relato, el acusado señala haber perdido el conocimiento y desconoce lo sucedido a continuación.

El caso. La desaparición de Susana fue denunciada por la familia el 19 de julio y su cuerpo fue hallado el 24 de ese mes en el pozo ciego de la vivienda que compartía con Ponce, ubicada en Blanco Encalada al 200, Temperley. Ponce fue arrestado en Constitución y se encuentra detenido desde ese día bajo prisión preventiva.

La autopsia determinó que la mujer murió estrangulada manualmente, recibió cuatro puntazos en el abdomen, golpes en el rostro y quemaduras de cigarrillo.