Cayó parte del techo del Centro de Formación Laboral


El conflicto entre los padres de los chicos que asisten al Centro de Formación Laboral 1 de Lomas de Zamora y las autoridades del Consejo Escolar tiene una nueva arista. Mientras se desarrollaba una reunión en el centro, se derrumbó parte del techo causando un mayor malestar debido a las “deplorables” condiciones en las que se encuentra.

Según Liliana Rosas, una de las madres que encabeza el reclamo por “condiciones dignas de estudio para los chicos”, aseguró que “de milagro” no se encontraba nadie en ese lugar.

“Realmente fue de pura suerte que no había nadie por ahí que pudiera llegar a ser aplastado. Nosotros estábamos reunidos con la inspectora de Educación Especial y con un inspector de Infraestructura del Consejo. Cuando terminamos y nos estábamos yendo, sentimos como una explosión y vimos como caía un pedazo de mampostería”, relató Rosas. Además de los que estaban reunidos, también se encontraban cuatro chicos con sus maestras en el fondo del edificio que no sufrieron lesiones por el derrumbe.

Renovación de los reclamos. Ante este episodio que no produjo víctimas “de pura suerte”, el CFL se encuentra cerrado debido “al peligro que supone que se sigan cayendo pedazos”.

“Está cerrado hasta que decidan desde el Consejo que se va a hacer. Por lo pronto, los padres seguimos como estas últimas semanas. Este martes se acercaron desde Infraestructura del Consejo para romper la parte de yeso y empezar a reestructurar. Pero en realidad no sabemos qué van a hacer porque no tenemos explicaciones claras”, comentó la mujer. “Es por este tipo de cosas que nosotros veníamos reclamando. Nosotros estamos mal y nuestros chicos merecen un lugar donde no corran riesgos sus vidas. Esperemos que esto despierte alguna novedad. Los padres no vamos a abandonar la lucha y seguimos acá firme”, concluyó.

El Centro de Formación. Comenzó a funcionar en 1983 y nunca tuvo una sede propia. En la actualidad al edificio, que además de estar en malas condiciones es alquilado, asisten doscientos chicos con discapacidades, de entre 18 y 21 años. Se trata del único de Lomas que recibe a los egresados de las escuelas de educación especial de la zona.