Cristina: “El caso de Argentina ha servido para cambiar la historia”


En la vuelta a la actividad oficial, pero sin mostrarse públicamente, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner analizó lo que dejó la cumbre del G-20 en Australia, a la que fueron en representación de la Argentina el ministro de Economía, Axel Kicillof, y el canciller Héctor Timerman.

“Por primera vez en la historia del G-20 la cuestión de la reestructuración de deudas soberanas fue planteada en el comunicado final”, destacó la jefa de Estado a través de la red social Twitter.

Remarcó la importancia de la exposición y el respaldo internacional al país, en el conflicto con holdouts. “El caso de la Argentina ha servido ya efectivamente para cambiar la historia de las emisiones de deudas soberanas”, celebró Cristina.

Explicó que “hoy hay aproximadamente 1 trillón de dólares de deuda en denominación norteamericana de bonos emitidos con esta misma cláusula pari pasu, tan arbitrariamente interpretada por el juez Griesa. O sea, cualquiera de esas deudas, si fueran reestructuradas, tendrían el mismo problema que tuvo la deuda argentina si algún tribunal similar al de Nueva York hace su propia interpretación tan interesada, de cualquier cláusula”.

El documento final del G-20. El documento final -de tres páginas- habla en el punto 12, sobre un total de 21, de la importancia de contar con "procesos de reestructuración de deuda soberana ordenados y previsibles".

En el anexo, en tanto, bajo el título "Temas de Acción Futura", refiere a la "litigiosidad" desatada a partir de la acción de los fondos buitre y ante la necesidad de "dar previsibilidad" a las procesos de reestructuración de deuda.

Especulación financiera. La Presidenta remarcó “el peligro que implican los fondos buitre para el sistema financiero internacional” y aclaró: “Quedaron reflejadas otras posiciones que venimos llevando al G20 desde 2008: agenda de demanda agregada, empleo de calidad, infraestructura”. “La lucha contra la especulación financiera, la evasión fiscal de las grandes corporaciones, hoy forman parte de las discusiones del G-20”, celebró la Presidenta, tras la reunión que mantuvo con los funcionarios.

Crisis financiera mundial. En otra seguidilla de tuits, la Presidenta remarcó que “La inversión a escala mundial representa un 40 por ciento de lo que era antes de la crisis en el 2008” y mencionó que “el representante de la OCDE destacó que el comercio mundial está a la mitad de lo que debería ser, según las estimaciones”.

“Por la crisis se destruyeron ya 33 millones de puestos de trabajo, y con el crecimiento a nivel actual recién se recuperarán en 2018. Una década perdida para el mundo. Una tragedia para millones de personas”, valoró. Y precisó que “la relación entre deuda y PBI en Europa pese a los brutales ajustes se incrementó con la crisis y en promedio, del 68% en 2006 al 96% hoy”. “En los paises desarrollados pasó del 75% en 2006, al 106% en la actualidad”, acotó.

Consideró, entonces, que “peor desastre… imposible”. “Aunque siempre todo puede empeorar si se persiste con la misma medicina”, criticó la Jefa de Estado.

La salud de la Presidenta. El ministro del Interior y Transporte de la Nación, Florencio Randazzo, afirmó que Cristina se encuentra bien de salud. “Que se queden tranquilos que Cristina está bárbara”, remarcó.

Asimismo, el funcionario nacional valorizó el rol de la mandataria en la política argentina, al señalar: “Lo que no le perdonan a Cristina, y esto lo digo hoy (por ayer) en el Día del Militante, es haber emancipado la política de los poderes corporativos y mediáticos”. Para Randazzo, estos sectores “condicionaron a todos los gobiernos históricamente en la Argentina, haciendo un enorme daño, pero no a un presidente, si no a las mayorías populares”.