Britez acusó al Frente Renovador de “engañar al vecino”


En diálogo con Info Región, Britez aseveró “no” asombrarle la renuncia del hermano del diputado nacional Darío Giustozzi a su banca de concejal.

“Era obvio que iba a renunciar porque no viene del ámbito político. Encabezó la lista para preservar el apellido y engañar al vecino”, manifestó.

Sobre el trabajo de Eduardo Giustozzi en el Concejo, evaluó que “en la última etapa presentó algunos proyectos interesantes pero nada que se pueda decir que es de un tipo militante y que camina los barrios”.

Un “engaño”. Britez recordó, en este punto, las críticas que provocó la decisión de Darío Giustozzi de poner a su hermano al frente de la lista massista en el distrito en las elecciones de 2013 y manifestó que “hubo un claro engaño al vecino”.

“Cuando Darío saltó al Frente Renovador, el vecino común no supo que había saltado porque jugaba ese jueguito de decir que iban a continuar con el proyecto nacional pero modificando ciertas cosas. Esto sólo sirvió para confundir al vecino”, indicó y remarcó que “ahora el engaño se acabó ya que mostraron fehacientemente que son el FR y juegan políticamente como el FR”.

“Soportar que te impongan la mayoría”. Al realizar un balance de lo que fue el trabajo el año pasado en el Concejo, Britez admitió que “fue una tarea difícil pero no imposible” por la amplia mayoría con la que cuenta el massismo en el recinto.

“Por suerte, pudimos sacar varios proyectos pero cuando uno es minoría sabe cómo es el juego y hay que soportar que la mayoría te imponga el número, guste o no”, lamentó.

Señaló que frente a la situación desigual del Concejo, desde el kirchnerismo se “milita mucho en los barrios y se le enseña al vecino que el recinto no es un lugar extraño a ellos, sino, que tienen que participar y pedir explicaciones de por qué votan en contra de proyectos que son para los vecinos” y consideró que “ese el trabajo que se puede hacer como minoría”.

“No pedíamos cosas insólitas”. La concejal kirchnerista advirtió, no obstante, que “esta situación perjudica porque uno no pide cosas insólitas” y ejemplificó la discusión por el cambio de sentido de la calle Castelli.

“No era necesario modificar a mano única la calle porque no tuvieron en cuenta que hay un taller protegido de niños discapacitados y por el cambio le corrieron la parada del colectivo que los dejaba en frente del lugar. Ellos dijeron que no y taparon todo con la amplia mayoría”, criticó.

Añadió que “es una barbaridad que se manejen de esta manera ante estas situaciones que afectan al vecino” y reclamó que “tienen que priorizar la necesidad de los vecinos y no al vecino que necesita que tenga una mano única para sacar el auto de su casa cómodamente”.

“El trabajo a nivel general del Concejo se hizo tal cual se tenía que hacer. Hubo algunas comisiones que se pudieron armar y otras no, hubo situaciones complicadas pero todo tiene que ver con que fue un año preelectoral”, completó.