Detuvieron a un joven por el crimen del policía en Claypole


La detención fue concretada en Florencio Varela por efectivos de la Jefatura Departamental Almirante Brown. El acusado sería menores de edad.

En el operativo, la Policía secuestró tres armas de fuego -todos revólveres de diversos calibres- y hasta una planta de marihuana de tres metros de altura, según confiaron las fuentes.

“Estamos seguros de que este muchacho es el autor material del crimen. Estaba sindicado en la causa por testigos que lo reconocieron”, dijo uno de los jefes policiales que trabaja en la pesquisa.

Los investigadores aún buscan a otros dos sospechosos ya identificados como menores de edad que, según la investigación, acompañaban al ahora detenido al momento del crimen del agente Carlos Céspedes.

El homicidio ocurrió el martes, alrededor de las 22.30, cuando Céspedes, quien pertenecía a la Guardia de Infantería de la Policía Federal (PFA) y estaba vestido de civil, esperaba el colectivo en la parada de la esquina de Monteverde y Charcas de Claypole, para regresar a su casa en Quilmes.

Según contaron luego algunos testigos a la policía, dos hombres armados, uno de ellos de pequeña contextura física, se le acercaron y lo amenazaron con intenciones de robarle dinero y sus objetos de valor. Aparentemente, el agente se identificó como policía y extrajo su arma reglamentaria, con la que intentó defenderse, aunque no llegó a dispararla.

Los delincuentes le dispararon dos balazos que ingresaron en la zona dorsal derecha y en la zona lumbar izquierda y cayó gravemente herido.

Los ladrones huyeron con la pistola marca Bersa calibre 9 milímetros reglamentaria del efectivo y con otros objetos personales, y abordaron un Peugeot 504 donde los esperaba un tercer cómplice.

El herido fue asistido por vecinos que escucharon los disparos y lo trasladaron al Hospital Subzonal Materno Infantil Dr. Eduardo Ollier, de San Francisco Solano, donde finalmente murió como consecuencia de las lesiones que le provocó el disparo.