El celular del empresario desaparecido se activó el martes


En una declaración que brindó el 26 de febrero pasado cuando le balearon el frente de su casa en Lanús, el hombre desaparecido contó que no sabía de dónde pudo haber venido ese ataque porque no tenía deudas ni enemigos.

Fuentes policiales y judiciales informaron que por el momento, a cuatro días de su desaparición, no hubo novedades de su paradero.

Lo único que pudieron comprobar los investigadores es que el teléfono Nextel del empresario se activó el martes -a 24 horas de la desaparición- durante unos breves minutos para chequear los mensajes de voz que había recibido, para lo cual fue necesaria la contraseña, es decir una clave de seguridad.

Los mismas fuentes judiciales revelaron que el vehículo Volkswagen Vento con el que el empresario llegó el lunes por la mañana al garage situado en Lavalle y Florida, en pleno centro porteño, ayer fue requisado por efectivos de la Policía Federal, quienes levantaron rastros que están siendo analizados por los investigadores.

La Justicia porteña está definiendo quién entiende en la causa por la averiguación de paradero, ya que si bien todo arrancó con un habeas corpus presentado ante el juez de instrucción Manuel de Campos, éste desestimó el recurso al comprobar que Díaz no se encontraba detenido y envió el expediente a sorteo.

La causa recayó en el Juzgado de Instrucción 30 de Jorge Adolfo López, que lo más probable es que delegue la instrucción en la Fiscalía Nacional en lo Criminal de Instrucción 1, subrogada por la fiscal Estela Andrades.

Además, las fuentes explicaron que “por conexidad” hay otra causa en el Juzgado de Instrucción 5 de De Campos que podría absorber este expediente por paradero, por lo que ahora el juez López o la fiscal Andrades deberán analizar si se quedan con el expediente o si la vuelven a derivar a De Campos.

Otro dato. Cuando el 26 de febrero desde una moto balearon la puerta de la casa de Díaz, en la calle Diputado Pedrera 1819 de Lanús, el empresario declaró que no sabía de dónde podía venir la intimidación.

Según las fuentes, Díaz declaró en la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 20 de Lomas de Zamora que cuatro días antes había echado de su empresa de ambulancias a cuatro empleados, pero que no creía que los balazos tuvieran nada que ver con eso y, además, le dijo a los investigadores del ataque que no tenía "deudas ni enemigos”.

Díaz es dueño de una empresa de ambulancias llamada “May Day”, pero además tiene actividad como financista en el microcentro porteño.

Fuentes de la investigación revelaron que se están investigando sus relaciones y en ese contexto chequeando si mantuvo o mantenía una relación sentimental con una reconocida vedete, además si el lunes por la mañana debía encontrarse con alguien en particular.

El empresario desapareció el lunes, cuando dejó su automóvil en un estacionamiento ubicado a dos cuadras de su oficina de San Martín y Lavalle, de esta capital, donde esa mañana no llegó.

La desaparición fue denunciada el lunes a la noche por la ex esposa del empresario, Natalia Puccar, quien, pese a estar separados, convivía con Díaz en la vivienda de Lanús que fue baleada.