Francisco recibió a Carlés en el Vaticano


El Sumo Pontífice recibió al abogado y académico propuesto por el Poder Ejecutivo para el máximo tribunal en el marco de un llamado de la Santa Sede que busca "luchar contra la pena de muerte" con "acciones concretas" que buscan "salir de las habituales condenas".

"La idea que transmitió el Sumo Pontífice se basa en los lineamientos que ya estableció el año pasado y que se basan en tres pilares que a su entender son incompatibles con la pena de muerte y las penas perpetuas: la reparación, el arrepentimiento y la confesión", describió Carlés tras la reunión.

"Francisco nos reiteró su intención de ir hacia acciones concretas que salgan de las habituales condenas. En algunos países en los que es difícil poder llegar a la abolición de la pena de muerte, por ejemplo, se busca avanzar moratorias, tal como ocurrió en febrero en Pennsylvania, Estados Unidos", agregó desde Roma Carlés, jurista y doctor en Derecho Penal por la Università degli Studi di Ferrara.

De la reunión participó también Federico Mayor, Presidente del Comisión Internacional contra la Pena de Muerte y ex director general de Unesco.

Carta. En el encuentro, Francisco entregó a Carlés y a Mayor una carta en la que expresa que "la pena de muerte es contraria al sentido de la humanidad y a la misericordia divina, que debe ser modelo para la justicia de los hombres", en base a ideas que el Pontífice compartió en otra misiva anterior que envió "a la Asociación Internacional de Derecho Penal y a la Asociación Latinoamericana de Derecho Penal y Criminología, del 30 de mayo de 2014".

"Como expresé en mi alocución del 23 de octubre pasado, la pena de muerte implica la negación del amor a los enemigos, predicada en el Evangelio. Todos los cristianos y los hombres de buena voluntad estamos obligados no sólo a luchar por la abolición de la pena de muerte, legal o ilegal, y en todas sus formas, sino también para que las condiciones carcelarias sean mejores, en respeto de la dignidad humana de las personas privadas de la libertad", agregó el Sumo Pontífice en la carta que entregó ayer a los juristas.

"Hoy día la pena de muerte es inadmisible, por cuanto grave haya sido el delito del condenado", aseveró Francisco, quien agregó que "es una ofensa a la inviolabilidad de la vida y a la dignidad de la persona humana que contradice el designio de Dios sobre el hombre y la sociedad y su justicia misericordiosa, e impide cumplir con cualquier finalidad justa de las penas".

"No hace justicia a las víctimas, sino que fomenta la venganza", criticó también Francisco.

Audiencia privada. Previo al encuentro de ayer, Francisco recibió el jueves a Carlés en forma privada durante una hora, en coincidencia con el segundo aniversario de su entronización y de las celebraciones por San Giuseppe, el día que la tradición católica romana conmemora a la figura paterna.