Persecución, tiroteo y un delincuente muerto


La persecución se extendió más de 22 kilómetros hasta el otro extremo de la ciudad y generó al menos tres tiroteos con la policía.

El hecho comenzó cerca de las 20 de ayer en una fiambrería ubicada en la calle Colombres al 100 bis, en el barrio Fisherton, a una cuadra de la avenida Circunvalación, en el extremo oeste de la ciudad, cuando cuatro delincuentes armados ingresaron a robar.

Según las fuentes policiales, los ladrones se apoderaron del dinero de las ventas del día y de las billeteras y objetos personales de los clientes, como así también de una cortadora de fiambre que se hallaba sobre uno de los mostradores, tras lo cual huyeron en un Toyota Corolla gris que se hallaba estacionado a pocos metros del comercio.

Las víctimas del asalto llamaron inmediatamente al teléfono de emergencias policiales 911 y policías y gendarmes salieron en busca del Corolla con los delincuentes, al que divisaron en la avenida Circunvalación y comenzó una persecución.

De la persecución, que se extendió cerca de tres cuartas partes del recorrido total de la avenida que bordea la ciudad y generó tres tiroteos en distintos momentos, participaron una veintena de patrulleros policiales y de la fuerza federal.

La balacera. El primer tiroteo ocurrió en la avenida Presidente Perón y avenida Las Palmeras, donde los ladrones huyeron por Circunvalación y a la altura de bulevar Avellaneda se enfrentaron con policías que se hallaban en un móvil de la Comisaría 33° y volvieron a escaparse.

Desde allí los asaltantes continuaron su huida por Circunvalación, perseguidos por los dos patrulleros, a los que se iban sumando más móviles a medida que pedían refuerzos.

Luego los ladrones dejaron la Circunvalación y cruzaron la ciudad de oeste a este por avenida Pellegrini y al llegar al final, en la avenida Belgrano, chocaron con un móvil de Gendarmería, con cuyos integrantes también se tirotearon.

Finalmente los ladrones huyeron hasta villa Manuelita, en Ayolas y Circunvalación, en el extremo sureste de la ciudad, contra el río Paraná, donde se bajaron y se siguieron tiroteando con la policía y la Gendarmería con el saldo de un asaltante muerto y tres detenidos, que aún no habían sido identificados.

En ese lugar se vivieron momentos de mayor tensión cuando numerosos habitantes de la villa reaccionaron con violencia ante la presencia de la veintena de móviles policiales y de la Gendarmería.