Avanza lentamente el traspaso de hospitales de la Región a Provincia


Si bien la iniciativa de provincialización de hospitales comenzó a analizarse hace cuatro años en el marco del saneamiento de la Cuenca Matanza Riachuelo -por orden del entonces magistrado de la causa, el juez federal de Quilmes Luis Armella- en la región sólo se efectivizó en uno de los hospitales previstos, el Wilde de Avellaneda. En tanto, el Alende de Lomas de Zamora también está en vías de cambiar de manos y el Santamarina, de Echeverría, y el Carrillo, de San Vicente, aún son una incógnita.

La decisión de mudar la administración de los centros de salud a la órbita provincial se basó en la necesidad de reforzar la atención de las instituciones médicas de atención primaria ubicadas en diferentes puntos de la Cuenca, ya que se trata de una de las zonas de mayor vulnerabilidad sanitaria del país, cuyas consecuencias inevitablemente repercuten sobre la calidad de vida de sus habitantes.

En su momento, en la región, la medida recayó sobre los hospitales Alende, de Lomas de Zamora; Santamarina, de Esteban Echeverría; Ramón Carrillo, de San Vicente y Wilde, de Avellaneda. Mientras que este último funciona bajo la órbita provincial desde mayo, en el caso del Alende se celebró la firma del convenio que oficializó su traslado el 16 de septiembre, aunque se concretará recién a partir del 1 de enero.



El caso más reciente. Para el traspaso del hospital Materno Infantil de Ingeniero Budge “aún restan concretarse cuestiones técnicas, como la transferencia del mobiliario y del personal”, según detalló el secretario de Salud local, Alfredo Distéfano, a Info Región.

Además, advirtió que los empleados municipales que cumplían tareas en el hospital “no se quedarán sin trabajo” ya que “serán absorbidos por el área de atención primaria”, es decir que serán “redistribuidos” en los 43 puntos sanitarios que posee el distrito, unidades de salud que, según Distéfano, serán “priorizadas” por el Municipio. “De esta forma, el Alende funcionará mejor y tendrá un mejor presupuesto. Así podremos priorizar la atención primaria”, defendió la medida.



El Wilde, el primero y hasta ahora el único. Si bien el Wilde ya cambió de manos, su traspaso fue de lo más conflictivo. En los primeros días de diciembre del año pasado, el Concejo Deliberante de Avellaneda había aprobado –en sesión extraordinaria- el proyecto de provincialización a través de la sanción de un convenio con el Ministerio de Salud bonaerense. No obstante, a fines de enero el juez de Garantías de Avellaneda Luis Carzoglio dio lugar a una medida cautelar presentada por representantes legales de los trabajadores del nosocomio, que por su condición de empleados municipales pretendían frenar la provincialización, reclamo al que adhirieron vecinos que también se oponían a la medida.

Sin embargo, desde la Secretaría de Salud del Municipio aseguraron que el hospital "pasó a la Provincia" el 6 de mayo. “Está totalmente provincializado y trabaja en su totalidad. La cautelar tuvo vigencia hasta abril”, precisó Luis Parrilla, titular de la cartera sanitaria municipal. Respecto al reclamo de los trabajadores en torno a la continuidad laboral, advirtió que “un porcentaje de los mismos continúa trabajando para el Municipio, tal como se había acordado”.



Con la soga al cuello en San Vicente. En el distrito, el sostenimiento del hospital Carrillo insume casi la mitad del presupuesto municipal, por lo que esperan que el próximo año se concrete la medida. “Para nosotros es muy pesado el hospital. El área de Salud, que incluye al Carrillo y a seis centros de atención primaria, consume un 40 por ciento del presupuesto municipal”, explicó a este medio el secretario de Salud local, Carlos Leguizamón.

Además, detalló que el nosocomio cuenta con 85 camas, entre las cuales 5 son de terapia intensiva, además de salas de cirugía y el área de clínica, que generan una “alta demanda de atención e insumos”. “Hacemos más de mil partos por año”, precisó.

Si bien Leguizamón afirmó que luego de cuatro años aún “desconocen” cuándo el hospital pasará a la órbita provincial, presagió que ello podría ocurrir el año que viene. “Este es un año en el que van a haber cambios a nivel político y los plazos dependerán del presupuesto provincial del próximo gobernador, quien verá si esto es factible”, concluyó.



Sin avances en Echeverría. Otra incógnita gira en torno al hospital Santamarina, que prevé convertirse en un materno infantil una vez que, en Echeverría, abra sus puertas el hospital del Bicenterio. Lo cierto es que en este último la finalización de las obras está prevista para diciembre, mientras que su funcionamiento a pleno -la apertura de todos los servicios- podría llevar dos años más. De esta manera, el traspaso pareciera estar supeditado a esto último.

En tanto, el secretario de Salud local, Andrés Burke, Viale le explicitó a este medio que el traspaso a la órbita provincial del Santamarina “está en estudio”. En ese sentido, consideró que el Municipio debe “evaluar” cuál es el mejor camino a seguir y explicó: “Es una cuestión técnica sobre por qué provincializar un hospital y por qué no”.

Entre las cuestiones técnicas a evaluar para tomar aquella decisión, Burke viale destacó la “adecuación” y la “reorganización” de los servicios brindados por la Comuna en materia de salud. “Nosotros tenemos en marcha un Hospital (por el del Bicentenario) que está a punto de terminarse en su grueso de insfraestructura, y uno tiene que pensar que dentro de ocho meses va a tener dos. En ese contexto, hay qué pensar que servicios va a brindar en uno y cuáles en otro”, precisó en diálogo con Info Región.

Por último, no desestimó que el Santamarina se convierta en un materno infantil ni bien comience a funcionar el del Bicentenario. “Es una posibilidad. Uno de los estudios de impacto tiene que ver con eso”, concluyó el funcionario comunal.