Ante el calor y las lluvias, advierten sobre el dengue


El aumento de la temperatura y la repitencia de las lluvias, que se registraron la semana pasada y están anunciadas para los próximos días, amenazan con la generación de un contexto propicio para la reproducción del Aedes Aegypti, el mosquito que transmite el dengue. Es por eso que especialistas en Epidemiología de la región recomiendan incrementar los recaudos en esta época del año.

Desde el área de Epidemiología de la Región Sanitaria VI -que abarca los partidos bonaerenses de Avellaneda, Lanús, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Esteban Echeverría y Ezeiza, entre otros- advirtieron que si bien “no se registran casos de contagio” en la actualidad, es necesario “evitar el estancamiento del agua”.

“Desde octubre aumenta la concientización sobre la erradicación del insecto, ya que el aumento de la temperatura y el registro de mayor cantidad de lluvias preparan el escenario ideal para la propagación de los insectos”, advirtieron, aunque apuntaron que es entre diciembre y febrero “cuando existen mayores chances de contagio”.

“Los elementos fundamentales para la cría del mosquito son las lluvias y el calor, además de la existencia de caldos de cultivo, como recipientes y piletas con agua”, advirtió a este medio la titular de Epidemiología de Región Sanitaria VI, Graciela Mazú. Es que, según detalló, el “estancamiento de agua” en baldes, canaletas y neumáticos constituyen el principal caldo de cultivo en barrios, casas y plazas, por lo que instó a “guardarlos o taparlos”.



Nuevos virus que amenazan con desembarcar en Argentina. Hace un mes ya se había encendido el alerta sanitaria a nivel provincial, cuando desde el Ministerio de Salud se instó a quitar cacharros de fondos y jardines para evitar no sólo la propagación del virus del dengue, sino también del “chikungunya” y el "Zika", el cual “ya llegó a Brasil” y también es transmitido a las personas por el Aedes Aegypti.

Es que si bien no reviste riesgos severos como el dengue, el virus Zika puede provocar fiebre leve, sarpullidos que suelen comenzar en la cara y se extienden al resto del cuerpo, dolores en las articulaciones, en particular en las manos y pies, y dolor muscular, de cabeza y conjuntivitis.

En definitiva, la sintomatología es muy similar a la del dengue y la chikungunya y suele comenzar entre 3 y 12 días después de la picadura del mosquito.

En diálogo con Info Región, la coordinadora general de Vigilancia Epidemiológica de Almirante Brown, Gabriela Szewczuk, explicó que, como el dengue, las otras dos enfermedades nacieron en África, pero -a diferencia de la primera- “recién llegaron al Continente hace dos años, más precisamente a la región caribeña”.

“Con el corrimiento progresivo de las temperatura de los polos, la enfermedad se va expandiendo. Todo depende de las temperaturas ambientales. Va más allá de las estaciones, que ya no están tan marcadas. Con 15 grados de temperatura promedio y con las últimas lluvias producidas por el fenómeno del Niño, los mosquitos pueden criarse y desarrollar su ciclo, y a eso le tenemos que sumar que los virus pueden desarrollarse en otras regiones y viajar con las personas que se trasladan hasta acá”, apuntó Szewczuk.



Consejos para prevenir.



-Vaciar, dar vuelta o colocar bajo techo todo elemento con capacidad para colectar agua como baldes, frascos, botellas, juguetes o cubiertas que puedan quedar a la intemperie en los patios.

-Limpiar las canaletas con regularidad para favorecer el drenaje del agua y tapar los tanques de agua.

-En el interior del hogar, cambiar con regularidad el agua de floreros y recipientes donde beben las mascotas.

-Colocar mosquiteros en puertas y ventanas.

-Usar aerosoles repelentes, tabletas insecticidas o espirales.

-Turistas: para aquellos que decidan visitar zonas donde se registran pacientes infectados, usar repelentes, ropa clara que cubra la piel, insecticidas y mosquiteros.