El diputado bonaerense del Frente para la Victoria Miguel Funes fue muy crítico con la Ley de emergencia administrativa, sancionada el jueves por la Cámara baja provincial en medio de un escándalo entre diputados del kirchnerismo y del macrismo.
“Hay artículos que atentan directamente contra la ley 10.430, que es la que protege y genera los derechos y garantías para los trabajadores del ámbito público”, mencionó Funes a Info Región, en referencia a los artículos 25, 26 y 27, que “hablan sobre la nueva forma de contratación para quienes accedan a trabajar en el Estado”.
Los mismos, explicitan que “no se genera ningún tipo de vínculo, ningún tipo de dependencia, derecho o de forma de prórroga al contrato, lo cual impide en todo momento el acceso como planta permanente”, según marcó el diputado.
“También nos preguntamos qué va a pasar con los compañeros que hoy están contratados, si cuentan con las previsiones contenidas en la 10.430, y los que están en planta transitoria y tienen la oportunidad de pasar a planta permanente”, expresó.
“¿Qué va a pasar con estos trabajadores cuando el contrato llegue a su vencimiento y no se lo renueven? Estimamos que se va a extinguir la relación y esto claramente pone fin a la carrera del trabajador dentro del ámbito público y, a la vez, busca ir achicando el Estado”, señaló y consideró que “abre la puerta a la flexibilización laboral y la precarización”.
Licitaciones. Otra cuestión que criticó el diputado sobre la ley sancionada es que “a las empresas que liciten no se las va a regular como se hizo habitualmente, no se va a controlar si están dentro de un registro de proveedores”. “Los organismos de control no van a cumplir el mismo rol y nos genera por lo menos algún tipo de preocupación”, manifestó.
En ese sentido, sostuvo que la emergencia “facilita los negociados”. “Quienes son los adalides de la democracia nos prohibieron la palabra, quienes dicen defender el trabajo tocaron la ley 10.430 del trabajador público, quienes hablan de la transparencia son los que hacen mucho más flexibles los controles y los tiempos con la excusa de la burocracia”, criticó.
Manifestó, a continuación, que los Gobiernos nacional y provincial “no creen en el Estado, no le interesan las políticas públicas de cara al pueblo, por lo cual no necesitan trabajadores dentro del Estado y sí necesitan empresas privadas para tercerizar todos los servicios”.
Críticas al FAP. Además, cargó contra los diputados del FAP que “le dio las manos que faltaban” al oficialismo en la votación de la emergencia y en una moción previa.
“Planteé una moción para que se permita entrar a una delegación de trabajadores. Fue rechazado por el FAP, Cambiemos y el Frente Renovador. No sé de qué progresismo está hablando el FAP en este último tiempo”, disparó.
El escándalo. La sesión de ayer culminó entre gritos de los diputados del kirchnerismo y empujones con los oficialistas.
Al respecto, Funes se defendió de “las injurias de algunos medios”. “Si me exalté y levante la voz, es porque me habían cortado el micrófono. Walter Abarca (FpV-PJ) tampoco pudo exponer y tampoco pudieron hablar los diputados del FIT”, cuestionó.
“En cuanto terminó la sesión, se generaron forcejeos y un personal de la Cámara me saca de manera violenta para que me vaya del recinto. Las autoridades me vinieron a pedir disculpas y lo niegan”, completó.
La emergencia “abre la puerta a la flexibilización laboral", según Funes
