Molinetes que impiden el paso, transeúntes que se enfrentan con los guardas y personal de seguridad que desvía el amontonamiento de personas al viejo puente de 14 de julio y Avellaneda. La situación en la estación de Temperley, por estas horas, es de verdadero caos. Es que la medida dispuesta por la Operadora Ferroviaria del Estado Trenes Argentinos impide a aquellos que no sean usuarios del servicio cruzar de este a oeste por el puente. Muchos, desesperados por no llegar tarde a su trabajo evitan desviarse y optan por comprar boleto, es decir pagar los 2 pesos correspondientes sólo para poder cruzar.
Otros se desvían por el puente antiguo, aunque el mismo no se encuentra en las mejores condiciones. "Dicho puente se muestra, a las claras, peligroso, sin iluminación y con una altura que impediría su acceso a personas de edad avanzada, así como el desplazamiento de cochecitos para bebés, o de personas con problemas de salud, entre otros", sostiene el reclamo en Change.org. 
Por la nueva disposición, son muchos los comerciantes que deben realizar un recorrido más largo para abrir sus negocios, son muchos los transeúntes que deben caminar de más para llegar de un lado a otro y son muchos los alumnos del colegio Tomás Espora, sobre Santa María de Oro, que "están llegando tarde a clases", según las autoridades de ese establecimiento.
"Los vecinos de Temperley expresamos nuestra gran preocupación por la decisión de las autoridades del Ferrocarril Roca de instalar molinetes y personal de seguridad en el puente de la estación, medidas estas que aíslan ambos lados de nuestra ciudad, impidiendo que los vecinos puedan cruzar sin un pasaje", señalan en la red virtual de reclamos.
Cintia Vespasiani
¡Abran el puente de Temperley!, el pedido de los vecinos en la Web
