El sábado pasado, “entre las 6 y las 7”, un colectivo que era remolcado chocó contra el puente peatonal de Pasco y Salta, en el barrio San José de Lomas de Zamora, al “soltarse la correa que lo arrastraba”. Afortunadamente, "no había transeúntes" en el puente ni en la calle, por lo que no se registraron heridos.
No obstante, hay dos hechos que preocupan a los vecinos: el inminente derrumbe del puente y las limitaciones para acceder a la zona donde hay varios comercios.
En diálogo con Info Región, desde kioscos, almacenes y pollerías advirtieron que “no saber si el puente se va a caer o no, limita mucho porque la gente no se acerca por miedo, aunque sí hay bastantes curiosos”.
En la zona y alrededor del puente, el tránsito está cortado y vigilado por Policía Municipal. Rita, quien vive a dos cuadras del lugar, indicó que “muchos vecinos piden que el puente se reabra y que se habiliten esos carriles porque los camiones pasan por las calles que son tranquilas, o que lo eran hasta el sábado”.
Además, desde el kiosco lindero a la parte del puente que se derrumbó, señalaron que están “esperando a ver qué pasa, con el comercio abierto pero a la expectativa”.
El titular de la Delegación Municipal de San José Oeste, Roberto Torres, explicó que “venía un camión remolque que llevaba al colectivo del interno 32 y cuando dobló, el mismo giro hizo que se desprendiera y el colectivo golpee una de las columnas que es la que quedó destruida”.
Señaló que “se cercó todo de manera preventiva para que no pase a mayores por si se desmorona” y luego se comunicaron con autoridades provinciales: “Como es una ruta provincial, los llamamos para que vengan y lo evalúen para ver qué se hace al respecto. Vinieron el sábado, el domingo, el lunes y dijeron que en el transcurso de la semana iba a venir la empresa a empezar a desmontar lo que está todo roto y estaban analizando la posibilidad de tirar todo y armar un puente nuevo”.
Respecto al restablecimiento del puente, Torres detalló que “un técnico dijo que mantener el puente puede llevar tres o cuatro días, y poner un puente nuevo es fácil y rápido porque según las leyes vigentes son puentes de fierro, se montan, se hace la estructura metálica y se van poniendo los bloques, y eso lleva una semana”.
“Me hubiera gustado que ya hubieran arrancado”, lamentó, y apuntó: “Estamos esperando. Nos preocupa la seguridad de los vecinos. Si se cae la parte que está a punto de caerse, no sabés cómo puede repercutir. Quizás salen volando pedazos y lastiman a alguien. El arquitecto que vino dijo que no se iba a caer ningún otro sector pero se cayó uno”.
MAP de la Redacción de Info Región.
Preocupación de los vecinos por el estado del puente
