Es de vital importancia entender que los fuegos artificiales pueden causar serias complicaciones en nuestras mascotas, en los bebés y en personas sensibles a los ruidos y a las luces fuertes. Es el caso de las personas con autismo, quienes presentan hipersensibilidad en sus sentidos y pueden verse seriamente afectados en sus conductas, debido “a lo disruptivo que representan los fuegos pirotécnicos”, como advirtió a Info Región, la acompañante terapéutica Natalia Sánchez.
“Es un problema a nivel sensorial, más que un riesgo en sí mismo, por una cuestión de que muchos tienen dificultades sensoriales, de procesamiento sensorial. Y como suelen ser una carga de estímulos muy alta, por el ruido o por las luces, los fuegos artificiales tiende a desorganizarlos un montón”, sostuvo Sánchez.
Una de las impulsoras de la ONG Padres TEA-TGD de Esteban Echeverría, Viviana Casco, indicó que las dificultades no solo se presentan solo por el tema de la pirotecnia, sino que “festejar Navidad o Año Nuevo es algo totalmente nuevo”.
“No todos los días nos juntamos todos para festejar. No es algo habitual. Entonces, lo de las Fiestas es una alteración en la rutina que ellos, normalmente, no están acostumbrados. Y les cuesta muchísimo el tema de los cambios bruscos”, explicó Casco.
Recomendaciones. Tanto Sánchez como Casco hablaron de la necesidad de “explicar con anticipación” sobre lo que puede ocurrir en Navidad o en Año Nuevo.
“Hay muchas cosas a nivel conductual que se pueden hacer como es anticipar el tema de las fiestas, para que los chicos sepan qué va a pasar, que todo lo que pasa es parte de un festejo. Siempre transmitiendo esa información por medios que ellos puedan comprender. En caso de chicos con escaso lenguaje, utilizar imágenes; buscar ambientes lo más familiares posibles para el chico, y diferentes estrategias, dependiendo del registro sensorial de cada chico”, manifestó Sánchez.
Para Casco, “anticiparse a ese cambio permitirá manejar la situación para que los chicos puedan disfrutar”. “Hay que explicarles bien, con imágenes y demás, qué es lo que va a pasar, cómo va a hacer y asi ellos tengan un nivel de ansiedad bajo y estén tranquilos”, agregó.
Recomendaciones. Sánchez aclaró que “para cada chico hay diferentes recomendaciones para regular y tratar la desorganización sensorial”, causada por los ruidos fuerte o las luces disruptivas. “Es posible que cada chico pueda necesitar estrategias distintas, ya que todo depende del registro sensorial de cada uno y de la manera particular en la que se esté trabajando”, evaluó.
En líneas generales, la profesional explicó que “la situación de estrés por los ruidos y demás hay que evitarlos, no solo por los chicos con TEA, sino también por los bebés”. “En general son cuestiones disruptivas ambientalmente y hay que pensar en medidas preventivas. Lo mejor puede ser tratar de concientizar por alguna vía alternativa de festejo e informar sobre cómo afectan los ruidos y las luces molestas para ir disminuyendo su consumo”, concluyó.
PF de la redacción de Info Región.
Advierten por el impacto de los fuegos artificiales en personas con autismo
