Al salir de la estación de Lomas y comenzar a desandar la peatonal Laprida, el ruido aturde. Es un motor que ruge. O, en realidad, varios. Es que cada dos o tres locales, un alimentador o generador de energía es el que permite la actividad comercial, aunque son muchos los clientes que desisten de ingresar a comercios sin luz donde la temperatura es inhumana y lo que se vende está casi a oscuras.
“Esto a nosotros nos perjudica más que a nadie. Yo prefiero que se corté la luz en mi casa y no acá, mira lo que te digo”, vocifera una mujer sentada en el frente de un local sobre Meeks. Es su local. Y nadie entra. “¿Quién va a querer entrar a comprar? No se ve nada por más que puse tubos y adentro la temperatura es infernal”, asegura a Info Región. El mismo infierno. No mentía.
Haciéndose eco de la problemática, la Cámara de Comercio e Industria envió hace unas semanas una nota al gerente de la sucursal local de Edesur, Jorge Binetti. “No sólo por los cortes de electricidad acontecidos en distintas zonas del partido, particularmente por lo que sucede en arterias céntricas, donde además hay falencias en la provisión de energía trifásica”, señaló a este medio el titular de la entidad, Alberto Kahale.
La situación perjudica en extremo a los comerciantes y la solución ofrecida por la empresa prestadora es, en muchos casos, cambiarlos de fase. “No nos quejamos del calor, sino por la pérdida de ventas. A mí ya me cambiaron de fase cinco veces en lo que va del año y esa no es una solución definitiva”, se queja Mirta desde un local sobre Gorriti.
Mientras, los motores rugen. En algunos casos, los aparatos son gestionados por la Cámara ante la empresa. Pero en muchos otros son los propios comerciantes los que deciden invertir en el alquiler o compra de los mismos.
“Un comerciante en Meeks 115 desde el 24 de diciembre está con una fase sola y tiene trifásica. Hicimos miles de reclamos porque se quemó un cable que está bajo tierra. En Loria al 200 en cambio hubo un corte de luz grande y se perdió un día de trabajo, pero se lo arreglaron. Se conecta una parte y se desconecta la otra”, lamentó.
Y detalló que en la zona Edesur colocó tres generadores. “Son de gran potencia y están alimentando la zona de Las Lomitas, desde Pavón para el lado de Puente La Noria y otro en Sarmiento que alimenta otra parte. Estamos en una situación crítica donde realmente hay muchos cortes. Todos los días tenemos y les cuesta mucho arreglarlos”, señaló.
Cintia Vespasiani
Comerciantes padecen cortes constantes desde Navidad
