Con el apoyo del Partido Laborista, el partido Independiente, radicales de Forja y el apoyo del Movimiento Obrero, Juan Domingo Perdón se impuso sobre la Unión Democrática con el 56% de los votos.
Desde el interior del país, los partidos de extracción Radical, Socialista, además de los grupos Yrigoyenistas y FORJA entre otros, conformaron la fuerza por lo que el compañero de fórmula resultó ser Hortencio Quijano. Figuras como Arturo Jauretche y Raúl Scalabrini Ortíz, adherían a este espacio político que luego reconoceríamos como peronismo.
Con tiza y carbón militantes de un nuevo sueño, se lanzaron a las calles, para reafirmar con su compromiso, la revolución que diera sus primeros pasos en aquella recordada Secretaría de Trabajo y Previsión. De esta manera enfrentaron a la Unión Democrática apoyados abiertamente por el embajador estadounidense Spruil Braden.
Luego del triunfo de aquellos días febriles, dos gobiernos peronistas, hasta su derrocamiento en 1955, permitieron implementar la justicia social en el país, logrando la inclusión en la vida social y política de los olvidados de siempre.
El compromiso de Perón largamente cumplido lo expresaba de la siguiente manera en aquellos días “Hoy me siento obligado más que nunca, y yo que jamás en mi campaña he prometido nada, hoy juro, ante este solemne pueblo, que no he de descansar ni de día ni de noche para hacerlos felices en la medida de nuestras fuerzas”.
* Por Antonio Arcuri (ex Ministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires)
Primer triunfo peronista
