Los incidentes se registraron el viernes en la residencia oficial de la gobernadora Alicia Kirchner, cuando la ex presidenta había acudido –con su nieta Helena- a cenar. Manifestantes apedrearon la vivienda e ingresaron a los jardines. Desde el interior, armaron barricadas con muebles para evitar que ingresaran a la casa. El presidente Mauricio Macri rechazó la violencia en cualquiera de sus formas y el Gobierno confirmó que asistirá a la provincia.
El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, se comprometió a “seguir ayudando”. "El Estado nacional va a estar presente dándoles ayuda como lo venimos haciendo desde el primer día de nuestra gestión, pero ellos se tienen que dejar ayudar también", expresó.
"Así como dijimos que nos encontramos un Estado desmantelado, quebrado a nivel nacional, también ocurrió lo mismo en Santa Cruz", señaló, pero analizó: “Es una provincia que ha sido gobernada prácticamente desde el retorno de la democracia por los mismos, hasta por la misma familia diría yo".
También afirmó que "los gobernantes de Santa Cruz tienen que hacer lo que corresponde" que es “ir ordenando gradualmente el desequilibrio fiscal que tienen y también trabajar en el fortalecimiento de sus instituciones, como corresponde, como exige la ciudadanía a nosotros y a ellos también".
“El Estado nacional va a estar presente en Santa Cruz”
