Temor. Eso es lo que reina por estas horas en las poblaciones de Puyehué y Entre Lagos, luego de que una nube de cenizas y polvo del volcán Caulle comenzara a caer sobre las ciudades, en el sur de Santiago, a la altura de la provincia argentina del Neuquén.
La comunidad está preocupada porque a esta situación se suman ruidos subterráneos, movimientos y la nube de vapor de agua vista esta semana sobre el cordón del Caulle, cono que se activó el año pasado provocando un desplazamiento de cenizas hasta Buenos Aires, según reportó la agencia italiana Ansa.
El alcalde de Puyehue, José Luis Queipul, dijo hoy a radio Bío Bío que las personas deben mantener la calma y que no hay riesgos.
"Hemos estado en contacto permanente con el comité de emergencia del municipio y la Onemi (Oficina Nacional de Emergencias), organismos que han asegurado que no hay riesgo de una nueva erupción del volcán Caulle", añadió.
El director regional de la Onemi descartó una activación del Cordón Caulle y afirmó que la ceniza se debe al viento Puihua, que sopla desde el este.
Se informó que la cantidad de ceniza -en su mayoría en suspensión- no representa un peligro para la comunidad, por lo que no es necesario el uso de mascarillas ni quedarse en las casas.
La dirección del viento debiera cambiar durante las próximas horas, por lo que la ceniza dejaría de estar presente en estas comunas.