“Feliz 2018 para todos, por un año con muchos éxitos”. Este mensaje había sido escrito por Federico Aristimuño cuando pasaban minutos de la medianoche. Se fue a festejar el cambio de año y encontró la muerte.
Federico tenía 24 años y le gustaba la gastronomía y el kickboxing. Fue asesinado el 1 de enero, a la salida de una fiesta privada en la calle Florencio Parravicini al 800 de Glew, partido de Almirante Brown.
Se desconocen los motivos del ataque, pero hay testigos que hablan de una discusión previa al disparo que terminó con su vida. El balazo impactó, a muy corta distancia, en su cabeza y nada pudieron hacer por él.
No hay detenidos. La causa, caratulada como “homicidio”, está en manos del fiscal Gerardo Loureyro de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora.
MDA de la Redacción de Info Región
Festejos teñidos de sangre: asesinaron a un joven en Glew
