La CGT advierte sobre eventuales despidos frente a la "crisis"


Juan Carlos Schmid, triunviro de la CGT, encabezó una movilización a la sede del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), renovó críticas a las políticas económicas y reclamó que se de marcha atrás con el tarifazo. También rechazó la reforma laboral y advirtió que puede haber una nueva ola de despidos.

"Es una provocación y un atentado al bolsillo", dijo, alundiendo al tarifazo en los servicios públicos. "Expresamos el malestar de los que no pueden llegar a fin de mes", planteó, al tiempo que dejó en claro que "hay una crisis muy importante".

El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, anunció que habrá una reducción en el gasto público, en el marco de la conferencia de prensa brindada junto a Luis Caputo, para ratificar el rumbo económico y la política cambiaria tras la suba del dólar. "El ministro habla de un recorte del gasto público y sabemos cómo termina esto. Va a haber despidos, empezando en el sector público y se va a pasar al privado", recplicó Schmid.

El documento. “Rechazamos el aumento desproporcionado de las tarifas y el proyecto que degrada las condiciones laborales”, es el título del documento difundido, para la convocatoria a la movilización de este viernes a la sede del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE).

El aumento desmedido e irrazonable de las tarifas de los servicios públicos puso al descubierto el deterioro sostenido de los ingresos de los trabajadores argentinos.

El creciente nivel inflacionario, que lejos de apaciguar hoy parece superar incluso el del año anterior, provoca el aumento desmesurado de los alimentos y productos de primera necesidad, erosiona el poder adquisitivo de los salarios y se retroalimenta con el valor de los servicios públicos.

Resulta imprescindible restablecer una relación permanente entre el valor de los salarios y el de los servicios públicos.

La vulnerabilidad de la economía nacional, jaqueada por el alto nivel de endeudamiento externo e interno, la falta de inversiones externas y locales, las altas tasas de interés que estimulan la especulación financiera, la innecesaria importación de bienes manufacturados y de materias primas que afectan decididamente la industria nacional, la permanente fuga de capitales y la errática política cambiaria, tienen graves consecuencias sobre la situación social y laboral de los trabajadores.

La especulación financiera nuevamente eclipsa a la producción, favorecida por tasas de interés exorbitantes e instrumentos financieros alentados desde el propio gobierno.

Reiteramos la necesidad de atenuar la presión impositiva sobre los ingresos de los trabajadores.

La falta de un programa nacional de infraestructura básica, agua potable y cloacas, de suministro eléctrico, de servicio de gas; de servicios sanitarios, de viviendas populares, de transporte público y de seguridad ciudadana, afecta esencialmente a los trabajadores y a los sectores más vulnerables.

Si el programa económico del Gobierno no pone el eje en el aspecto social, no será posible revertir la desigualdad y atender las necesidades de los sectores más desprotegidos.

Ante tanta incertidumbre económica y social el gobierno impulsa nuevamente reformas laborales que disminuyen las indemnizaciones por despidos y socavan el orden público laboral a favor de los empresarios volviendo más desiguales las relaciones laborales.

Rechazamos las modificaciones a la legislación laboral que atentan contra los derechos individuales de los trabajadores y disminuyen las indemnizaciones laborales.

La Confederación General del Trabajo de la República Argentina reitera que el creciente deterioro de la situación social y laboral de los trabajadores, hace inviable la política económica.

Reclamamos enfáticamente la corrección de las políticas públicas en relación a las tarifas de todos los servicios públicos, (que afectan esencialmente a trabajadores y pymes) el intento de modificar la legislación laboral, que se atienda con urgencia las necesidades largamente postergadas de los jubilados y los trabajadores sin trabajo, el restablecimiento de los programas sanitarios y las políticas de protección económica de la sobreviviente industria nacional.

La Confederación General del Trabajo adoptará todas las medidas de acción sindical que considere necesarias para expresar el rechazo de los trabajadores de esta política económica que agudiza las desigualdades y no atiende las necesidades de los más vulnerables.


Cambios en la CGT. Los integrantes de la conducción de la central obrera, que encabeza el triunvirato conformado por Juan Carlos Schmid, Héctor Daer y Carlos Acuña, deliberaron el jueves durante más de tres horas en la sede obrera de Azopardo al 800 y determinaron que el 22 de agosto próximo -a exactamente dos años de ungido el actual consejo directivo- se elegirá una nueva conducción con un único secretario general a su frente. "Se congelaron y cajonearon las diferencias internas ante el nuevo embate del gobierno contra los trabajadores a partir de sus iniciativas de producir un 'tarifazo' y perjudicar a los trabajadores con la introducción de nuevos cambios laborales", dijeron los voceros.