Ortega: “Estoy orgulloso de este grupo”


A falta de 30 segundos para el final de la temporada, Banfield perdía con Hebraica por 4-3 y necesitaba quedarse con la victoria para decretar su permanencia. Con muchísimo amor propio logró imponerse y de esta manera mantnerse un año más en la Primera División.

Diego Ortega, director técnico del Taladro, destacó lo hecho por un equipo plagado de jóvenes y con un futuro promisorio. “En el primer tiempo no merecíamos ir perdiendo y tuvimos muchas oportunidades para anotar. Ellos tuvieron dos llegadas, no marcamos bien y terminaron ganando 2-1. Hebraica cuenta con un jugador diferente, que jugó en la selección, como es Matías Edelstein y todo su juego pasó por él”, manifestó.

Y agregó: ”En el segundo tiempo seguimos con la misma actitud que en el primero y con la confianza de que lo ganábamos. Estábamos en desventaja por 4-2 y a falta de 4:27 sufrimos la expulsión de Lucas Moya. El equipo realizó un gran esfuerzo para que no nos convirtieran y después metimos los tres goles para ganar. Todavía no sabemos si la última pelota se desvió o qué, pero por suerte entró”.

Ortega, que dirige al primer equipo desde la temporada 2008, se mostró muy conforme con lo hecho por sus dirigidos. Con mucho sufrimiento, Banfield mantuvo la categoría y jugará por cuarta temporada consecutiva en la élite del futbol sala.

“Por más que durante el año tuvieron que aguantarse mis retos y mi mal humor por no poder cerrar los partidos, estoy orgulloso de este grupo, que cumplió con el objetivo”, aseguró.

Si bien el final fue feliz, el Taladro estuvo muy cerca de haber perdido su lugar en la máxima categoría. Alvear había vencido a Pinocho y por eso mismo, Banfield estaba obligado a quedarse con los tres puntos. Ortega llegó a pensar en lo peor.

“Cuando íbamos 2-4 y había terminado Alvear, pensé que si nos convertían uno más ya iba a ser imposible. Nos quedamos con uno menos, no aprovecharon la oportunidad y con el tercer gol nuestro se encendió una luz de esperanza”, manifestó.

La remontada de Alvear (ganó sus últimos tres partidos) y los propios malos resultados hicieron que Banfield tuviera que luchar hasta la última jornada su plaza en Primera. En su partido final, los de Parque Avellaneda jugaron ante Pinocho, que puso suplentes, hecho que molestó en el Taladro.

“No me sorprendió lo de Alvear, sino lo de Pinocho, la actitud de la dirigencia de un club tan prestigioso. Les entregaron un partido decisivo. No jugaron las piezas fundamentales, lo hicieron chicos que no lo hacen siempre y de tercera. Como me dijo Santiago Escande al final del partido, nos salvamos por nosotros mismos y no por la ayuda de nadie. Fue un premio para el plantel. Este grupo se propuso defender los colores del club y lo hicieron a muerte”, explicó.

Si bien no era lo que esperaba, Ortega calificó como “positiva” la temporada, ya que cumplieron con el objetivo que se habían propuesto: dejar a Banfield en la máxima categoría.

“Nos habíamos trazado otra meta, pero las derrotas hicieron que el equipo se bajoneara e influyó la juventud del plantel. Con la llegada de Hernán, que volvió del retiro, tomó la presión y fue un importante envión anímico. Le estoy muy agradecido”, sostuvo.

A su vez, el director técnico piensa en lo que se le viene al Taladro en 2014: “Hay muchas cosas por corregir de todas las partes, el cuerpo técnico, la dirigencia y los jugadores. Tengo que hablar con ellos para ver si continuará el proyecto y después veré la posibilidad de traer refuerzos porque la próxima será una temporada muy difícil, pero no imposible. Cada partido será una final. Yo soy hincha, jugué, ascendí con este club y por eso quiero seguir”, concluyó.