El seleccionado argentino, como desde hace 20 años, volvió a quedar entre los mejores cuatro equipos en un mundial. En esta oportunidad, en La Haya, Holanda, derrotó 2-1 a Estados Unidos con dos goles de la mejor jugadora de la historia, Luciana Aymar.
Agustina Albertario, jugadora de Lomas Athletic, jugó varios minutos y hasta tuvo la posibilidad de convertir. La joven delantera, en su primer participación mundialista, regresa al país con el premio de un tercer puesto.
Aunque no brilló, el equipo argentino jugó un buen partido en el que Aymar dejó su impronta para la historia no sólo con los dos goles (a los 8 y 21, ambos en el primer tiempo) de la victoria sino por la forma en que se ganó.
Lauren Crandall había anotado el empate transitorio del equipo estadounidense (a los 11), pero Lucha, quien había adelantado a la Argentina, desequilibró el duelo.
“Se ganó con mucho espíritu y mucho corazón”, señaló Aymar tras la victoria, con la que el equipo argentino conquistó su cuarta medalla mundialista consecutiva, tras el oro de Perth (2002), el bronce de Madrid (2006) y el oro de Rosario (2010).
Mantenerse en la vanguardia
Si bien soñaba con la final y el oro, la emblemática capitana de las Leonas se despidió del máximo torneo en la cancha y haciendo goles, después de haber sufrido una lesión muscular, la primera en un mundial, que la dejó fuera de dos partidos de la fase de grupo y mermó su rendimiento frente a Holanda y en el último duelo.
“Fue un mundial difícil, diferente a todos los torneos que me tocaron vivir, pero en la vida las cosas pasan por algo, es una adversidad más, y hoy agradezco lo que me pasó y poder disfrutar una medalla de bronce más con Argentina”, señaló Aymar.
Anímicamente fue el partido más complicado para las argentinas, que venían de una dura derrota por 4 a 0 en semifinales ante Holanda, pero las ganas de subirse al podio fueron más fuertes. En el arranque, el conjunto albiceleste se mostró sólido en el juego y tuvo buenas oportunidades de cara al arco, la primera en el minuto 5, con un remate desde el borde del área de Habif, que pegó en la parte posterior del travesaño. Tres minutos después, la segunda chance terminó en gol argentino. Rocío Sanchez Moccia remató de revés y Aymar desvió la bocha enviándola a la red.
Albertario pudo ampliar el marcador, por medio de un disparo de revés, pero dos minutos después Estados Unidos provocó su primer córner corto y empató el partido. En una jugada estudiada, de desvío, Crandall sorprendió a la defensa argentina y a la arquera María Mutio, quien ayer entró de titular.
Poco después, las argentinas tuvieron dos córner cortos a favor que no lograron rentabilidad. Y antes de que tuvieran que lamentar las ocasiones perdidas, en el minuto 21, Aymar se encargó de desequilibrar el duelo con un remate desde el centro del área.
Antes del descanso, Estados Unidos tuvo dos chances de desvío, mientras Argentina tuvo otra dos de córner corto, pero ninguna terminó en gol.
Un complemento de solidez
En el segundo tiempo, Estados Unidos tuvo más posibilidades de empatar que Argentina de marcar el tercer gol, aunque pudo hacerlo, en su quinto córner corto a favor, que volvió a fallar.
Las Leonas, fieles a su espíritu, acabaron el encuentro en defensa y con sufrimiento, metidas en el área, incluida Aymar, y luchando por cada pelota hasta el último segundo del cotejo.
Así, a pesar de que buscaban el oro, el bronce de las Leonas dejó al hockey femenino de Argentina, una vez más, en lo más alto.
Ellos van por la misma obsesión
El seleccionado argentino masculino enfrentará hoy a Inglaterra por la medalla de bronce del Mundial de La Haya, Holanda, con la oportunidad de quedar en lo más alto de la historia del hockey nacional.
Agustín Mazzilli, jugador de Lomas Athletic y una de las figuras de este equipo, volverá a estar desde el arranque e intentará volverse con la medalla de bronce.
Tras caer ante Australia por 5 a 1 en las semifinales, los dirigidos por Carlos Retegui afrontan una nueva hazaña. La mejor actuación de Argentina en una Copa del Mundo fue un sexto puesto en 1986 y 2002. Alcanzar semifinales ya es un logro nunca antes obtenido, al situarse entre los cuatro mejores del mundo, pero ahora podrán dejar a la Argentina incluso un escalón más arriba.
"Teníamos la ilusión de ganarle a Australia, pero ahora nuestro máximo objetivo es subir al podio, conseguir el bronce”, indicó el capitán albiceleste, Lucas Rey, tras la derrota frente a los australianos.
Rey destacó que "Inglaterra es un gran equipo. En los últimos torneos se metió siempre en semifinales", pero confió en "las armas" del conjunto albiceleste para imponerse y conseguir el podio.
"Tenemos que seguir siendo un equipo compacto, que defiende en bloque y sale a jugar en el contragolpe aprovechando las habilidades individuales y jugar”, remarcó.
Inglaterra figura en el cuarto puesto del ranking mundial pero los Leones ya demostraron que pueden ganarle a rivales a priori de mayor jerarquía como lo hicieron ante la poderosa Alemania, a la que en la fase de grupos se impusieron por 1 a 0.
"Tener un bronce en una copa del mundo es importante, hay que ganar, tenemos la ilusión de hacerlo. Perdimos solo con los finalistas, y eso te marca el nivel de los jugadores", indicó el DT, respecto a las derrotas de Argentina, que además de perder contra Australia cayó en el debut contra Holanda (3-1).
El duelo por el tercer puesto se disputará a las 7:30 de nuestro país en la previa de la final, que disputarán el anfitrión y subcampeón olímpico, Holanda, y Australia, líder del ranking mundial.
Bronce para las Leonas en La Haya
