Su nieta es criada por la familia del asesino de su hija


Hace algunos días, la persona que mató a su hija fue condenada a prisión perpetua por rociarla con alcohol y prenderla fuego. Ella, desde el momento en que falleció Roxana, reclama la tenencia de su nieta.

Delsa López está desesperada porque entiende que su reclamo por la tenencia de su nieta está “estancado” y “no es escuchado”. Mía tiene poco más de 2 años, y a los seis meses de vida perdió a su mamá por obra de su padre, Elio Javier Enrique. Su padre, condenado, tampoco forma parte de su vida porque está recluido y hoy la nena vive en la misma casa del asesinato y con los padres del femicida.

Sólo puede ver dos veces por semana, lo que el régimen de visitas le permite. “Antes de que reglamentaran el régimen de visitas, yo iba a verla y no me atendían. Cuando citaban a la otra abuela a declarar, directamente no iba, o iba sin un letrado”, contó López. También manifestó que, en una de las audiencias, el consejero familiar les dijo que las dos abuelas tienen el mismo derecho y que “la cuestión del homicidio no tiene nada que ver”.

“No puede ser así, no me pueden decir que no tiene nada que ver, si mi nieta se está criando en donde asesinaron a mi hija. Yo ya no sé a quién recurrir, siento una indignación muy grande”, dijo la madre de Roxana. Y la desesperación es tal que no descarta encadenarse en los Tribunales de Lomas de Zamora para que le den “respuestas”. “Es el juzgado 2 el que está trabajando mal”, señaló.

El régimen de visitas. Delsa puede visitar a Mía los martes y jueves de 14 a 18:30, y sábados o domingos desde las 12 hasta las 18:30. “Es muy injusto. Esto supuestamente era durante un período de adaptación, pero la nena cuando está conmigo está bien, come, juega, duerme, y todo en un segundo, porque después la tengo que llevar de nuevo. Entonces mi abogado pidió la extensión de la visita, pero me la negaron”, se quejó.

El caso. Roxana Vallejos fue asesinada por su pareja en la casa que compartían en Ingeniero Budge, cuando este la roció en alcohol para luego prenderla fuego. Ingresó al hospital con el 82 por ciento del cuerpo quemado. Mía tenía apenas seis meses.

El martes 18 de noviembre se cumplieron dos años del crimen, y Elio Javier Enrique fue condenado a prisión perpetua.

Proyecto de ley. La Casa del Encuentro presentó un proyecto para quitar la potestad de los condenados por femicidio.

“Lo que cambia con respecto a la situación actual es que hoy por hoy no hay una notificación formal entre jueces, sino que la familia tiene que pedir la perdida de la patria potestad. Se abre un proceso probatorio en el cual se va a ver si ese hombre que mato a la mujer en el marco de la violencia de género, implica un peligro para su hija. Nosotros creemos que ese peligro es bastante visible”, explicó Alejandra Lauría, coordinadora del área de investigación legal de la Casa del Encuentro.

“Si la mama falleció y el papa está preso, quedan las familias, tanto paternas como maternas. En el caso de que la mujer haya firmado alguna escritura o un documento formal diciendo que si le pasaba algo decidía que el niño quede en manos de la familia paterna, consideramos que hay que analizarlo para saber si realmente era la voluntad de la madre, o esto fue firmado en el marco de la violencia de género”, explicó. Pero en el caso de Vallejos no hay un documento firmado. ¿Entonces? “En principio se prioriza la familia materna, pero de todos modos es relativo, porque hay que ver como es la familia. Si se comprueba que a familia paterna es sana desde lo psicológico, que no se ejerce violencia y que no hizo nada en contra de la mujer víctima, y además su vinculo con la bebe es sano, no habría problemas”, acotó Lauría.