Desde la defensa, la abogada Patricia Sanmamed, ponderó la relación de “sometimiento y violencia de género” a la que estaba “habituada” Nora Amaya. Sostuvo que fue un estado de “hiperalerta” lo que motivó al homicidio. Basándose en causas similares previas, pidió al Tribunal Oral en lo Criminal 3, la “libre absolución” de Amaya por el uso de “legítima defensa en circunstancia de violencia de género”.
La fiscalía pidió la pena de “quince años de prisión por homicidio agravado por el vínculo”. El argumento se basó en que la situación de violencia “se evidenciaba de forma mutua”, por lo que “el escenario de violencia de género, no era comprobable”. Además, señaló como agravante el hecho de “daños y perjuicios contra la familia de la víctima”.
El caso. La mujer de 33 años se encuentra detenida por la muerte de su entonces pareja, Claudio Velázquez. Denunció que durante 10 años de relación, fue víctima de violencia de género y el 29 de diciembre de 2012, intentando defenderse, lo mató con un cuchillo. Durante esa semana, según sus declaraciones, Velázquez había abusado del alcohol y la golpeó en reiteradas ocasiones, además de haberla amenazado de muerte. En una de esas situaciones, ella se defendió y lo mató.
Amaya se entregó luego de ir al hospital y enterarse del fallecimiento de su esposo, y permanece privada de su libertad hasta este momento, a pesar del pedido reiterado por parte de la defensa de que se le otorgue la prisión domiciliaria, porque tiene hijos menores de 5 años.
Pidieron 15 años para Nora Amaya
