Baratta: “No le vamos a dar los superpoderes al intendente”


En diálogo con Info Región, el edil del Frente Renovador Salvador Baratta indicó que su bloque va a acompañar el Presupuesto “siempre y cuando las partidas estén bien administradas en las principales áreas y el intendente no tenga los superpoderes”.

La sesión en la que se tratará el Presupuesto se realizará el viernes y Baratta manifestó que junto con su espacio en la evaluación que se hizo de la previsión de gastos del próximo año, van a pedir que “se refuercen las partidas en seguridad y salud”.

“Queremos que tengan el mayor presupuesto porque son áreas de importancia y la principal demanda de Lanús”, remarcó.

El Presupuesto ronda los 1.487 millones de pesos, 400 millones más que este año. Al respecto, el concejal señaló que “cuando se habla de presupuesto, se habla de la recaudación que se puede originar y la voluntad de la gente de pagar impuestos”.

Advirtió, asimismo, que “la gente paga impuestos pero no lo ve reflejado en obras”.

No a los superpoderes. “Todos los bloques de la oposición tenemos que calcular que si no aprobamos el presupuesto, se va a aplicar el mismo que este año y eso no queremos. Lo que queremos es que se retiren las facultades extraordinarias”, aseveró el edil massismo.

Cuestionó que con esta facultad el Jefe comunal “puede mover la plata del municipio a su gusto y el Concejo no se va a enterar. Es mentira que después avisan al Cuerpo sobre esas modificaciones”.

Señaló, por otra parte, que desde el oficialismo “dicen que no, que se debe aprobar esta herramienta” pero remarcó que se “verán los votos con que se cuenta para sacar los superpoderes”.

Fiscal e Impositiva. La semana pasada, el Cuerpo aprobó por mayoría la preparatoria de la ordenanza Fiscal e Impositiva con un aumento del 30 por ciento. La ordenanza no fue acompañada por el FAP y por Unión Popular.

Baratta evaluó que “un 30 por ciento es un aumento normal al valor de vida que hay en la calle. Hay que tener en cuenta que las cosas suben más del 40 por ciento y no hay que ser ridículo y no se puede negar que los impuestos tienen que ser nivelados al costo de vida real”.

Reclamó, no obstante, que “de la misma manera que se elevan los impuestos, se tienen que ver reflejados en verdaderas obras y eso no se ve”.