Un espacio para que nenes internados puedan volar con la imaginación


Estudiantes de Bibliotecología del Instituto de Formación Docente y Técnica Nº35 inauguraron ayer la Biblioteca Cuenta Cuentos, ubicada en la Juegoteca –primer piso del hospital Luisa Cravena de Gandulfo- y ya cuenta con 350 libros que fueron obtenidos a través de donaciones de librerías, bibliotecas y voluntarios de la comunidad.

Según explicó a Info Región la coordinadora de Cuenta Cuentos del Gandulfo, Adriana Molina, “el evento fue muy positivo” y, en lo particular, se trató de “un aporte más” en su tarea como narradora. “La inauguración de la Biblioteca tiene una función social importantísima por la valoración del libro y de la lectura, y porque es un entretenimiento para esas horas tan largas de espera", señaló.

En diálogo con este medio, la estudiante de Bibliotecología Cintia Feztorazi, remarcó que "hay muchos chicos que ni siquiera saben lo que es un libro". “El objetivo es claro: que entren en contacto con la lectura", apuntó.

Las organizadoras también se encargarán de pasar una vez por semana por todas las habitaciones para dejar algunos libros a los chicos que estén internados y no puedan acercarse a la biblioteca.



Expectativas. Las creadoras del nuevo espacio tienen la determinación de continuar con este proyecto y hacerlo crecer hasta que pueda “incluir al conjunto de la comunidad”. Cintia espera "que se agrande para que todos participen, incluso los médicos", mientras que Paula agrega que tienen la intención de "aumentar la cantidad de libros, para que haya para todas las edades, no sólo para los chicos".

Adriana Molina explicó que “ahora la espera (en el área de pediatría) no va a ser mirando las paredes, sino que la mamá y el nene que quiera, va a poder agarrar un libro y ponerse a leer".



Cómo surgió la iniciativa. Se gestó a partir de un trabajo que las estudiantes tenían que hacer para la materia de “Gestión Cultural” de la carrera “Bibliotecología”. Según contaron a Info Región, decidieron acercarse a una biblioteca de la zona con el fin de llevar libros de ahí al hospital, pero no tuvieron respuesta.

Luego se contactaron con el jefe de Pediatría del Gandulfo, Jorge Larcamón, quien les confirmó que los chicos no tenían lectura mientras estaban en internados o esperando por ser atendidos. Entonces, decidieron buscar un espacio físico dentro del área de Pediatría que pudiera ser utilizado para su causa.

"Había una juegoteca que no tenía una interactividad con los chicos internados. Para incluirlos en la lectura, decidimos conjuntamente con Larcamón, construir una biblioteca infantil", indicó Paula Melgarejo, otra de las estudiantes de Biblitoecología.

Los libros de la Biblioteca Infantil podrán ser prestados a los niños en los que está inspirado el proyecto, los pacientes de pediatría.

Quienes quieran ayudar tienen que acercarse a la oficina de la Dirección de Pediatría, y entregar su donación a nombre la Biblioteca infantil de Pediatría, sector internación.