El magnate viajó a Washington desde Nueva York en su avión privado, un Boeing 757 -más grande que el Air Force One, el avión oficial de la presidencia- y ploteado con su nombre. Antes de despegar del aeropuerto de La Guardia, en New York, la aeronave recibió un saludo de honor con cañones de agua.
El encuentro comenzó pasadas las 13 hora Argentina en el Despacho Oval, que a partir del 20 de enero se convertirá en la oficina principal del republicano. Conversaron durante más de una hora y media, sobre una agenda abierta y variada, incluyendo "un montón de situaciones, algunas lindas, otras controversiales", dijo Obama.
Pese a que produjo cierto malestar entre la prensa acreditada que no se les permitiera tomar imágenes del ingreso de Donald Trump a la casa de Gobierno, al finalizar la reunión, el presidente en ejercicio y el presidente electo tuvieron una charla informal con la prensa, dentro del mismo despacho oval.
Conferencia. Al comenzar la ronda de preguntas, la oficina fue un caos de voces superpuestas y cámaras que no encontraban un lugar adecuado. Obama aprovechó la ocasión para darle a Trump un primer consejo sobre cómo lidiar con la prensa: "Si solo están gritando, no respondas ninguna pregunta".
Durante este encuentro, Trump destacó que se sentía honrado y que espera que su antecesor lo aconseje. Obama, por su parte, alentó a su sucesor a que trabaje con su equipo en los meses que quedan hasta el traspaso de mando.
"Tener una transición exitosa y pacífica es una característica de nuestra democracia y se lo vamos a demostrar al mundo", manifestó el miércoles Obama, adelantando lo que sería el eje de la reunión. Además, Michelle Obama recibió a Melania Trump para darle la bienvenida a la Casa Blanca.
Obama y Trump se reunieron en la Casa Blanca
