La lectura de los alegatos comenzó alrededor de las 11.30, en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora.
Tanto la Fiscalía como la querella solicitaron la pena por “homicidio agravado por alevosía y abuso de su función como integrante de fuerza de seguridad”. La defensa no mencionó un monto específico durante su alegato, sino que pidió que “se contemple la personalidad impulsiva y el trastorno neurótico del acusado”.
El abogado querellante Ismael Jalil, destacó que al solicitar que se tengan en cuenta como agravantes la alevosía y el abuso de su función, “lo único que le queda al acusado es perpetua, es decir, 32 años y un poco más”.
Asimismo, el segundo agravante se comprueba de dos formas distintas: “Ser policía y actuar en abuso de su función o cargo”, explicó. “Que es policía no cabe duda, porque el estado policial se mantiene aún cuando te jubilás. La única manera de perderlo es cuando entrás en cesantía”, detalló. Y por otro lado, manifestó que “el abuso de su función se dio al emplear el arma que él tiene por su condición de policía, por fuera del propio reglamento”.
El planteo de la defensa. La abogada pidió una pena menor para Mario Correa y solicitó que se evaluara como atenuante su estado psicológico. Según Jalil, “era esperable” que tuviera esta postura porque “desde un principió aceptó la autoría del hecho”. “Ella no pidió un monto fijo, sino un cambio de calificación”, añadió.
Sin embargo, Celia –madre de Mauro- manifestó estar “sorprendida” al escuchar que la letrada “reconoció todo lo que hizo su defendido”. “No hay vuelta que darle, ni su propia abogada lo pudo defender”, concluyó.
La sentencia. Será el martes a las 12, en la secretaría del TOC 3. Jalil aclaró su preocupación por esta decisión ya que “implicca que no se va a hacer una audiencia como la de hoy”. “La sentencia es un momento clave. Así como el público pudo estar en las audiencias de debate y en los alegatos, debería estar en la lectura de la sentencia para que puedan conocer los fundamentos desde la voz de los jueces”, expresó.
La situación del acusado. Mario Correa llegó detenido al juicio y la situación procesal se complicó a partir de la declaración de los testigos durante las primeras audiencias del juicio.
En la primera audiencia los testigos dieron cuenta del desarrollo de los hechos. Según la reconstrucción y a partir de lo relatado ese día, Correa habría disparado a los hermanos Silva desde el boulevard ubicado en la esquina de Yrigoyen y Quinquela Martín, Adrogué, porque los jóvenes intentaron frenar un hecho de violencia de género en las puertas del Bingo. En la segunda, declaró un policía que estaba dentro del Bingo y contó que Correa intentó esconderse.
En el ataque, Renzo resultó herido, mientras que Mauro recibió dos impactos de bala certeros y falleció en el acto. Tras el hecho, Correa volvió a ingresar al Bingo, aunque luego fue detenido cuando un policía vio que se le cayó la pistola de una bolsa naranja que llevaba. El crimen sucedió en la noche del 2 de julio de 2013.
Pidieron perpetua para Correa por la muerte de Mauro Silva
