Hector Pared fue citado ayer por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 10 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora para expresar “sus últimas palabras” antes de que el juzgado dicte la sentencia.
Durante los alegatos, la fiscalía había pedido 15 años de prisión para el acusado de “homicidio agravado por el vínculo”. Por su parte, la defensa había solicitado su absolución.
Pared hizo su descargo y se manifestó a favor del pedido de su abogado, Luis Aliana: “Pido una única oportunidad para seguir con el proyecto que tengo con mi hijo. Quiero seguir trabajando para mi familia y la gente que está conmigo”. “Estoy con ella (por Mónica) en todo momento y quiero seguir luchando para demostrar que puedo resarcir todo lo ocurrido”, completó.
El tribunal dio por finalizada la audiencia cuando el acusado terminó su pronunciamiento y dejó sentada la fecha en la que se dictará la sentencia: el martes 30 a las 12.
Argumentos disímiles. El 4 de junio habían declarado los seis peritos que intervinieron en la causa. Tres de ellos sostuvieron que Pared es “inimputable” debido al estado “emocional” en el que se encontraba al momento del hecho. Los otros tres disintieron con dicho análisis, ya que, a través de estudios psicológicos realizados al imputado, consideraron que el hombre se mantuvo “consciente” al momento de haber perpetuado el hecho. En estas posturas disímiles se apoyaron tanto la defensa como la fiscalía para efectuar sus alegatos.
Por un lado, el fiscal Jorge Betini Sensoni solicitó “que se condene a Luis Héctor Pared a 15 años de prisión por el homicidio agravado de Mónica Mareco”. Y por otro lado, Aliana solicitó “que sea rechazado en todos sus términos” el pedido de la condena y pidió su “absolución” basándose en la teoría de “emoción violenta”, aunque aclaró que en el marco jurídico vigente es más correspondiente emplear el concepto de “rabia”.
En caso de que no resuelvan absolver a Pared, la defensa alegó que sea juzgado con la pena “mínima” de ocho años de prisión. Además, al considerar que Pared “es un hombre útil a la sociedad” ya que “es un prestigioso radiólogo técnico”, también se solicitó que, en caso de aplicar un fallo condenatorio, el hombre pueda cumplirlo de forma domiciliaria, y de esa forma, pueda seguir ejerciendo su profesión.
El hecho. Ocurrió durante la noche del 18 de agosto de 2011 cuando Héctor Pared (58) volvió a su hogar, ubicado en Dean Funes al 2800, tras un viaje laboral al interior del país que había durado más de una semana.
La pareja habría discutido sobre presuntas infidelidades de la mujer, quien quería terminar la relación. En ese marco se habría producido el ataque de Pared.
A la espera de la sentencia, Pared pidió “una oportunidad”
