Avellaneda: el hogar de una maestra fue desvalijado por sus propios vecinos

La víctima denunció que los ladrones residen a metros de su vivienda y que trabajan en la Municipalidad de Avellaneda.

Un matrimonio de Villa Domínico, partido de Avellaneda, denunció publicamente que su casa fue desvalijada por ladrones que residen a metros de su vivienda desde donde se llevaron un televisor y notebook, una Playstation y los ahorros que venían juntando con su esposo.

El saqueo tuvo lugar durante la tarde del martes, cuando los ladrones aprovecharon la ausencia de la pareja que estaba trabajando, y tomó estado público cuando los damnificados salieron a los medios ante los cuales acusaro a la UFI 4 de Avellaneda de inactividad y no haber dispuesto ninguna medida.

“Estamos destrozados. Ya no quiero recuperar las cosas, lo único que quiero es poder salir a trabajar tranquila y vivir acá”, expresó acongojada Florencia, que es maestra de escuela y quien acusó del asalto a un padre e hijo que, según ella, trabajan en la Municipalidad de Avellaneda.

La pareja sospecha que empleados del municipio, que limpian las calles o los que podan y cortan el pasto, serían quienes marcan las casas que pueden robar en el barrio. “Alguno de ellos está atento a los movimientos, son los que nos ven salir a las 6 de la mañana y saben que no regresamos hasta la noche”, afirmó Florencia.

“Ya sabemos que están vendiendo nuestras cosas por villas cercanas”, completó en un móvil televisivo que dio en la esquina de San Lorenzo y Cangallo donde se desarrollaron los hechos.

El producto del robo fue guardado en una casa vacía a 30 metros de la vivienda de las víctimas: “La dueña de la casa falleció hace algunos años, ahora no vive nadie, pero el hijo y la nieta pasan seguido por el lugar para que no la usurpen“, comentaron vecinos de toda la vida.

El nombre de la nieta sería Florencia Seoane, de profesión abogada, y estaría implicada en el robo pues en imágenes que aportaron a la investigación se vería a la mujer cuando habilita el acceso de los ladrones a la casa que era de su abuela.

Además, dos horas después, afirman que Seoane fue grabada cuando cargaban los bienes robados en un auto blanco que sería de su pareja.

Florencia y su familia abandonaron su casa por temor

Tras lo ocurrido y por temor a experimentar un nuevo episodio de inseguridad y represalias, Florencia junto a su familia, su esposo y la hija de cuatro años de ambos, decidieron irse a vivir temporalmente a la casa de sus padres.

“Es desesperante, perdimos todo. Me tuve que ir escondida como una rata y yo no hice nada“, se lamentó la maestra que trabaja todos los días doble turno en escuelas de la zona y a la que también le robaron la bicicleta que usaba para ir de una escuela a otra..

“Apuesto a la educación porque soy docente y sigo creyendo. Quiero hacer mi trabajo tranquila y disfrutar con mis hija cuando llego a casa. Trabajamos (con el marido) para darle los gustitos que nosotros no nos pudimos dar. Me entristece mucho que se hayan metido con nosotros cuando nunca le hicimos mal a nadie”, continuó la mujer en su discurso.

La madre de un ladrón: “Si lo encuentro, lo vuelvo a entregar”

La madre de Joel Moreyra, apodado Huesito, admitió que su hijo fue quien participó del asalto a la casa de la familia de la maestra: “Si a mi hijo lo señalan como a un delincuente tienen toda la razón, pero no sé dónde está”, sostuvo la mujer.

Y añadió: “Estuve con el dueño de la casa que desvalijaron (Jonathan, esposo de la maestra), le dije que también lo estoy buscando porque lo amenazaron de muerte“.

En su descargo, la mamá de Huesito contó que anteriormente acercó a su hijo a un centro de rehabilitación para las adicciones: “Nosotros tratamos de ayudarlo de todas las maneras, ahora si él salió de la ‘granja’ y empezó a hacer cagadas…”

Por último, la mujer negó que su exmarido, Hugo, esté implicado en el asalto a la casa de la maestra, versión que circuló en boca de la pareja víctima. “El padre de Joel no tiene nada que ver, pero a él lo voy a volver a entregar”, aseguró sobre su hijo, de 21 años, que tiene antecedentes penales.