El 27 de agosto, familiares de víctimas de violencia institucional junto a organismos de derechos humanos, sociales y políticos participarán de la cuarta marcha nacional contra el Gatillo Fácil bajo el lema “¡Ni un pibe ni una piba menos! ¡Ni una bala más!”. En esta oportunidad, las columnas le sumaran la consigna “No a La doctrina Chocobar”.
La Coordinadora contra la Represión Policial (Correpi) es una de las organizaciones que convoca la movilización, que comenzará en el Congreso y se dirigirá a Plaza de Mayo. La cuarta marcha nacional contra el gatillo fácil tendrá sus réplicas en diferentes ciudades del país.
En diálogo con Info Región, María del Carmen Verdú alertó que “la problemática se ha multiplicado con este Gobierno”. “Desde diciembre de 2015 hasta mediados del año pasado habíamos advertido la profundización de las políticas represivas, pero de mediados de 2017 vimos una diferencia cualitativa que no se ha visto nunca: La justificación de las muertes”, expresó.
Verdú consideró que desde mediados del año pasado “hubo un estado de excepción en el que se suspendieron los derechos y garantías”. “Frente a cada hecho que le costaba la vida a una persona, el Gobierno salió directamente a reivindicar y defender la represión como política de Estado”, aseguró. “Pasó con la Gendarmería y Santiago Maldonado, con la Prefectura y Rafael Nahuel y el oficial (Luis) Chocobar”, recordó.
Advirtió que antes “no se vio nunca la reivindicación formal de las muertes”. “(Eduardo) Duhalde no salió a felicitar a la Policía después de las muertes del 22 de junio de 2002. (Fernando) De La Rúa tampoco se abrazó con los Gendarmes que fusilaron en Corrientes”, sostuvo, al tiempo que rechazó el encuentro de funcionarios con el policía de Avellaneda, acusado de “homicidio”. “Ni (Hipólito) Yrigoyen hizo algo igual con Héctor Varela cuando volvió de los fusilamientos de la Patagonia”, sentenció.
