Tras presentarse a indagatoria en el marco de una causa en la que se investigan irregularidades en la adjudicación de la obra pública, la ex presidenta de la Nación Cristina Fernández se metió de lleno en la discusión por la Reforma Electoral.
“No es casual la insistencia del voto electrónico”, dijo en el breve contacto que mantuvo con la prensa, blindada por cientos de militantes y dirigentes. Consideró que “nadie puede pensar en que esta política que están llevando a cabo pueda ser revalidada” y aventuró que de implementarse la BUE (Boleta Única Electrónica) se puede incurrir en el fraude.
Pidió a los legisladores de todos los sectores políticos que se comprometan y no permitan que la Reforma Electoral sea convertida en ley. “No podemos rifar un logro como es el sufragio universal, secreto y obligatorio. Sería muy triste para cualquier dirigente pasara la historia como cómplice de lo que podría ser un fraude electrónico”, aseguró.
A mediados de octubre, la Cámara de Diputados de la Nación dio media sanción a la Reforma Electoral impulsada por el oficialismo, que incorpora el sistema de votación de Boleta Única Electrónica en todo el país, así como la instauración del régimen de paridad de género en las listas de candidatos. Sólo quedaron afuera de la iniciativa los cambios que buscaba introducir el oficialismo en las PASO, para que estas se desarrollen con fórmula abierta y sólo habiliten el voto en una sola agrupación política.
La iniciativa para implementar la Boleta única Electrónica recibió 152 votos a favor y 75 en contra. Los votos positivos fueron aportados por Cambiemos, el Frente Renovador, el Bloque Justicialista y otras fuerzas menores; mientras que los sufragios en contra del proyecto fueron cosechados por el kirchnerismo y la izquierda.
Países como Alemania, Holanda y Paraguay implementaron el sistema de voto electrónico y dieron un paso atrás por considerar que vulnera los principios de fiscalización y secreto del elector, mientras que naciones como Australia, Kazajistán, Finlandia, Noruega, Reino Unido, Irlanda, Italia, Costa Rica, Guatemala y Filipinas lo probaron y también lo abandonaron.
El diputado Juan Cabandié había aclarado que esta modalidad “no garantiza la transparencia” y que, por el contrario, “es vulnerable”. “La tecnología no es sinónimo de transparencia, al contrario, yo diría que este voto electrónico es vulnerable y hay pruebas suficientes que han demostrado la vulnerabilidad”, refirió.
En contrapartida, el diputado nacional por la UCR Miguel Bazze había considerado que “es un avance importante” porque “los partidos políticos no tendrían que ocuparse de que la boleta esté en el cuarto oscuro, que es todo un tema, sobre todo para las fuerzas con menos estructura, no es una tarea sencilla”. “El voto electrónico garantiza transparencia porque hay muchos partidos que no pueden tener fiscales en muchos lugares”, había apuntado.
MDA de la Redacción de Info Región
“No es casual la insistencia con el voto electrónico”
