Videos de susurros, ASMR, y contenido reconfortante, los curiosos consumos culturales de las nuevas generaciones


Los hábitos de consumos culturales han ido cambiando a lo largo de la historia de la civilización, no es una novedad, pero la velocidad con la que hoy se producen esas transformaciones sí es una marca de esta época atravesada por las nuevas tecnologías digitales.

En apenas diez años, según un estudio reciente realizado sobre los jóvenes que forman parte de la Generación Z, que hoy tienen entre  14 y 25 años, da cuenta de una acelerada transformación en el tipo de contenido que eligen consumir a través de las redes sociales y plataformas de contenidos audiovisuales al estilo de Youtube.

Los datos son reveladores para las generaciones mayores no sólo por la masividad de ese consumo sino por el tipo de realizaciones que eligen ver. Se trata de producciones hasta hace pocos años inexistentes, creadas por y para los integrantes de esa Generación, que pueden resultar incomprensibles para los mayores pero que no son marginales.

El nuevo boom, registra el estudio, son los videos de susurros como sub-rubro de una categoría también novedosa que los agrupa, los videos ASMR. La sigla es una abreviatura de Respuesta Sensorial Meridiana Autónoma y remite a una suerte de “masaje cerebral” que se realiza a través de sonidos muy particulares o de gente que simplemente habla en voz baja ante la cámara durante varios minutos u horas.

Se trata de realizaciones orientadas, presuntamente, a producir un estado mental en el espectador que le permita un elevado nivel de relajación o incluso lo haga dormir.

Los sonidos, captados por micrófonos de alta calidad, suelen ser provocados por dedos en movimiento, golpeteo de uñas entre sí, frotamiento de alguna superficie o directamente el movimiento de la lengua dentro de la boca. Así pueden pasar largos minutos, en ocasiones pueden durar horas y constituyen verdaderas sesiones auditivas que presuntamente buscan provocar relax o sueño.

Los videos de susurros, solo en 2021, acumularon 65 mil millones de visualizaciones

Este video consiguió 22 millones de visionados

Los videos de susurros le agregan a esos sonidos una persona hablando en voz baja, como al oído, diciendo literalmente cualquier cosa. También los hay asociados a formas y a manos tocando esas formas que, se supone, generan un efecto placentero. Así, se pueden ver manos tocando material gelatinoso, quebrando láminas de algún material rígido o estrujando masas plásticas. Todo siempre adornado con muchos colores.

Otro rubro popular es el de los videos cottgecore, algo así como una realización en la que no pasa nada más que escenas de la vida cotidiana. Alguien se puede mostrar limpiando la casa, o lavando la ropa o tendiendo la cama. Cualquier tarea rutinaria se puede convertir en un video exitoso para la audiencia de la Generación Z.

Atrás parecen haber quedado los videos virales, los gatitos haciendo piruetas, los accidentes presuntamente graciosos, o las recetas de cocina. Eso es el pasado.

Los datos surgen de un estudio a nivel global realizado en 2022 por la consultora Ipsos para Youtube, pero los puede verificar cualquier que busque ese tipo de material en la web.

La usuaria Coromo Sara.ASMR, por ejemplo, sin exhibir ninguna habilidad ni carisma que se destaque, suma 1,6 millones de de suscriptores y tiene videos con medio millón de visitas promedio. Parece mucho, pero es poco.

El video Asmr soap with foam and glitter 💕✨ Crushing crunchy 💗 Cutting soap cubes 💕, de la usuaria ASMR SOAP, con 725.000 suscriptores, acumula más de 20 millones de visionados. No es necesaria la simpatía ante las cámaras, una figura agraciada o una destreza física relevante. Apenas unas manos que cortan jabones de colores y rompen láminas del mismo material.

Los datos del informe

Información suministrada por la plataforma más visitada del mundo revela que solo en 2021, los videos relacionados con ASMR acumularon más de 65 mil millones de visualizaciones en YouTube.

El estudio de la consultora, por su parte, afirma que un 83 % de los consultados, pertenecientes a la Generación Z, habían usado YouTube para ver contenido que les ayuda a relajarse. De hecho, el 90% de los miembros de esta generación afirma que ha visto un video que le ha ayudado a sentirse como si estuvieran en otro lugar.

Al parecer, los jóvenes, estresados, buscan contenido reconfortante durante todo el día con ese tipo de videos y también con transmisiones de la naturaleza en vivo, con música distendida en videos de más de 10 horas de duración. Se trata de grabaciones inmersivas en espacios naturales.

En la primera década del siglo, el video viral, gracioso o trágico, parecía ser el protagonista en las redes, en ese entonces, asegura el informe, “el panorama de la cultura pop era variado y un nuevo tipo de creador de videos en línea estaba cobrando importancia, pero todos los usuarios experimentaban la cultura digital básicamente de la misma manera”. Sin embargo, “la cultura de Internet se ha convertido en cultura pop y la cultura pop se ha vuelto más individualizada”.

En ese contexto, nuevos formatos y tecnologías de video parecen haber estallado en los últimos 5 años, al tiempo que una nueva generación de nativos digitales ha llegado a la mayoría de edad y con ella nuevas elecciones culturales.

El contenido “con buena vibra”, que transmite paz y naturaleza, “altamente estético” es considerado por la Generación Z como especialmente bueno para ayudar a las personas a lograr una sensación de transporte, algo que parece haber sido fuertemente demandado en los años de pandemia.

Así, el 90% de la generación Z asegura que vio algún video que los ayudó a sentirse como si estuvieran en un lugar diferente y el 83% ha usado YouTube para ver contenido relajante que los ayuda a distenderse.

Contenidos nostálgicos, que los remitan a su infancia, animales en su hábitat natural, ídolos y fans, y escenas de terror también están entre las preferencias de la nueva generación de consumidores, mostrando que, habitualmente para bien, siempre hay algo nuevo que puede ser creado.