Expreso Lomas: El conflicto alcanzó los 150 días

Con la línea paralizada, los trabajadores cumplen sus horarios de trabajo a la espera de una resolución. El jueves marcharán al Ministerio de Transporte.

Los meses pasan y el conflicto de los trabajadores de las líneas 112, 165 y 243 del Expreso Lomas no se soluciona. Tras 150 días, manifestaciones y movilizaciones, los trabajadores no obtuvieron respuesta alguna y se preparan para nuevas jornadas de propuesta. 

“Seguimos con la línea paralizada. Hubo cuatro ofrecimientos de distintas empresas al Ministerio de Transporte, que es el encargado de organizar el servicio de emergencia, pero hace más de 20 días que no tomaron una decisión”, señaló Hugo Wurtz, delegado de los trabajadores, en diálogo con Info Región

El chofer explicó que la cartera es la encargada de elegir una de las propuestas y llevársela al juez. “Todavía no hay ninguna solución. Esta semana estuvimos reunidos con el gremio y nos dijeron que va a esperar hasta el miércoles. De no obtener respuesta, el jueves nos movilizaremos al ministerio”, detalló.  

En esa sintonía, denunció que “el Gobierno se está cagando en todo, en los 400 laburantes y los 50 mil usuarios”. “La gente quedó varada gastando plata en combinaciones de colectivos, en seguridad. Este Gobierno parece dejarlos de lado. Nosotros reactivamos la situación a través del gremio. Si eran por ellos, no hacían nada”, destacó. 

Lucha de los trabajadores

La semana pasada, en una movilización realizada por los empleados de la fábrica Arcynur de Burzaco, los trabajadores de Expreso Lomas se hicieron presentes junto a otros de Canale, Cresta Roja y Mielcitas, para manifestar su apoyo. “La lucha obrera es de todos, por eso siempre es bueno recibir una mano. Es muy feo lo que estamos pasando nosotros y las demás empresas de la Región”, comentó Wurtz a este medio.

“¿Cómo le decís a tus pibes que no tenes para comprarle pan, leche o unas galletitas? Nosotros somos gente de laburo, no chorros. Queremos que traigan los colectivos y laburar.  Todos estamos cumpliendo nuestros horarios con la esperanza de un día llegar y encontrarnos los coches en la puerta”, concluyó.