Diferencias en el Gobierno: Fernández insistió en que no hay presos políticos

El Presidente pidió “prudencia” en la discusión de la condición de dirigentes detenidos. Se expresó en sintonía con Santiago Cafiero y Felipe Solá, a contramano de Elizabeth Gómez Alcorta.

Alberto Fernández

En medio de la polémica por la mención a los presos políticos en la Argentina, el presidente Alberto Fernández insistió en que no hay detenidos que cumplan con las condiciones para nombrados de esa forma. Elizabetth Gómez Alcorta fue la que habló de “presos políticos”, pero Santiago Cafiero, Felipe Solá y ahora el jefe de Estado se expresaron de forma contraria.

Fernández pidió hoy “prudencia” en la discusión sobre la condición de ex funcionarios detenidos por presuntos hechos de corrupción y afirmó que, en la Argentina, no hay “nadie detenido sin causa a disposición del Poder Ejecutivo”, condición necesaria para que alguien sea definido como “preso político”.

Dijo que, en parte, se trata de una “discusión semántica, que no es menor, porque el preso político es el preso sin causa que está a disposición del Poder Ejecutivo y yo no tengo a nadie sin causa; a mí me molesta porque no los tengo”.

Vale recordar que antes de asumir la Presidencia, Fernández  había solicitado la liberación de los ex funcionarios kirchneristas que continúan detenidos porque “están mal detenidos en la mayoría de los casos”, y los definió como “presos arbitrarios”, y no como presos políticos.

Santiago Cafiero había sido consultado por este tema, en una nota concedida a Infobae, y respondió: “Para nosotros no hay presos políticos en Argentina, lo que sí hay son detenciones arbitrarias. Sí entendemos que todas esas cuestiones, en el marco de los procedimientos que ya existen y que ya están con recursos presentados, la Justicia deberá determinarlas”.

La ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta, había desestimado las declaraciones de Cafiero y señaló que “en América Latina hubo y sigue habiendo presos políticos”. “A veces hacemos eje en cuestiones semánticas e intentamos poner diferentes posiciones, pero cuando vos tenés a una persona a la que se le hace un proceso judicial con la única finalidad de detenerlo por cuestiones políticas, eso es un preso político”, remarcó.

Por su parte, el canciller Felipe sola planteó que “no es malo que haya debate en el gobierno sobre algún tema”. De todos modos, dejó asentada su postura: “Hay casos de encarcelamiento que no se justifican jurídicamente y que están ligados a figuras que tienen relieve político. Eso no quiere decir que haya presos políticos”, dijo.