Oficializaron la nueva reglamentación para facilitar el acceso al cannabis medicinal

Así lo dispuso el Gobierno nacional a través de una publicación en el Boletín Oficial, que “facilita e impulsa la investigación científica orientada a los posibles usos terapéuticos”.

El Gobierno nacional oficializó este jueves la nueva reglamentación para la ley de uso medicinal de cannabis en Argentina, que “facilita e impulsa la investigación científica orientada a los posibles usos terapéuticos”.

Así lo dispuso a través del Decreto 883/2020 publicado hoy en el Boletín Oficial. El documento busca asegurar “el acceso a las terapias de forma segura e informada para todos los usuarios y usuarias”, incluso a través del “autocultivo o el cultivo solidario”.

En este sentido, la norma establece además que las obras sociales, el Estado y las prepagas “garanticen” ese acceso, al tiempo que se le otorga al médico “un rol fundamental en el acompañamiento de los pacientes” y se contempla la provisión “en forma gratuita por parte del Estado” de derivados de la planta a quienes tengan “indicación médica”.

Fuentes oficiales indicaron que este decreto reglamentario, firmado por el presidente Alberto Fernández, deroga y reemplaza la reglamentación dispuesta en 2017. Además, se crea el “Programa Nacional para el Estudio y la Investigación del Uso Medicinal de la Planta de Cannabis, sus Derivados y Tratamientos No Convencionales” en el marco del Ministerio de Salud.

El nuevo decreto reglamentario “facilita e impulsa la investigación científica orientada a los posibles usos terapéuticos y avanza en garantizar el acceso a las terapias de forma segura e informada para todos los usuarios y usuarias, otorgándole al médico un rol fundamental en el acompañamiento de los pacientes”, indicaron los portavoces.

Entre los objetivos figuran “la promoción dirigida a equipos de salud y organizaciones de la sociedad civil y la implementación de acciones de concientización sobre el uso del cannabis y sus derivados”.

“Impulsa el desarrollo de guías de asistencia, tratamiento y accesibilidad; la provisión en forma gratuita por parte del Estado de derivados de la planta para pacientes que cuenten con indicación médica y con cobertura pública exclusiva, y el impulso de investigaciones relacionadas con los fines terapéuticos y científicos de la planta de cannabis y sus derivados”, concluye el documento.