Tras el fallo de la Corte, Alberto y Cristina se mostraron juntos en Ensenada

"Esta es la foto de la unidad", aseguró el Presidente y aclaró que no habrá "tapa de diario" ni "sentencia judicial" que tuerza el rumbo de las políticas de cuidado.

El presidente Alberto Fernández presentó, junto a Cristina Fernández y Sergio Massa, el Programa Reconstruir, destinado a finalizar la construcción de 55 mil viviendas. “Esta es la foto de la unidad, de los que queremos poner de pie a la Argentina después de que la pusieron de rodillas”, sentenció el jefe de Estado. Y le reclamó a los jueces que no usen sentencias para “favorecer” a sus candidatos presidenciales.

“No va haber tapa de diario ni sentencia judicial que nos lleve a no hacer aquello que debemos hacer en favor de los argentinos. Esta es la foto de la unidad, de los que queremos poner de pie a la Argentina después de que la pusieron de rodillas. Nadie va a hacernos ceder eso”, aseguró el Presidente en el acto que se llevó a cabo esta tarde en Ensenada y también contó con la participación del gobernador bonaerense, Axel Kicillof; el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi y el intendente local, Mario Secco.

En ese marco, cuestionó al gobierno anterior. “Nos llenaron el país de miseria, de debilidad. Debilitaron cada una de las estructuras del Estado porque estaban convencidos que no era el Estado el que debía socorrer a los que no tienen casa, pensaban que de eso se iba a ocupar el mercado, pero el mercado va a donde hay plata. Donde hay una necesidad hay un derecho y debemos cubrirlo ese derecho”, planteó.

Valoró: “(Los planes de vivienda) los ideó Néstor, ejecutó en buena parte Cristina y yo vengo a terminar la obra. Es una secuencia que sigue el mismo rumbo. En los años de Néstor y Cristina, lo único que nos importaba era llevar más derechos, cubrir mas necesidad que argentinos y argentinas tenían”. “Es evidente que muchos no quieren esto, que quisieran que se construyera un barrio privado, casas de otro tipo y seguir postergando a los que objetivamente necesitan una casa. Los factores de poder en la Argentina existen y no nos quieren acompañar, no quisieron nunca. Siempre nos cuestionaron, precisamente, por las mejores cosas”, apuntó.

Respecto al fallo de la Corte, advirtió que un juez puede proponer a un candidato y votarlo, pero “un juez no puede usar la sentencia para favorecer a los candidatos que le gustan”. “Es muy triste ver la decrepitud del Derecho”, insistió el Presidente. “Esto no es solo lo que pasó ayer, porque las corporaciones económicas van a la Justicia y esos jueces deciden que el Estado no puede regular, en la pandemia, los precios de los celulares, de internet, del cable”, advirtió.

“El Gobierno va a respetar el fallo, pero era sobre un DNU que ya estaba caducado. Hay un DNU vigente, que es distinto. ¿Por qué opinó sobre una norma que ya no estaba vigente? Si quieren elegir un candidato, vayan y voten, pero no usen las sentencias”, planteó. “La sentencia sólo da títulos en los diarios pero prácticamente no tiene ningún efecto”, aclaró, al tiempo que dejó en claro que las decisiones de toman en pos de la salud de los argentinos. “Si van a fallar como están fallando, sólo fallan”, concluyó.

Por su parte, Kicillof se refirió a la causa de Dólar futuro, que se inició al final del mandato de Cristina Fernández, en el 2015. “Una parte del poder mediático se junta con el Poder Judicial y parte de la dirigencia política. Parece que se junta para molestar a la oposición, al kirchnerismo, al peronismo. Pero no eso, el propósito era que a través del poder de la Justicia, una parte del Poder Judicial, entrometerse en decisiones política. Judicializar las decisiones políticas de un gobierno. En aquel momento, especuladores quería forzar una devaluación inmensa de la tarea, a toda costa, porque era enriquecerse y empobrecer ala mayoría, pero además era por la campaña”, señaló.

“Aparecieron jueces que tenían que decidir ellos las políticas que se tenían que hacer. Quisieron forzar una devaluación por vía judicial. Hicieron un allanamiento de la mesa de operaciones del BCRA, cosa que no tiene antecedentes en la Argentina ni en el planeta. Y después impugnaban los instrumentos con los que se estaba operando, ese famoso dólar futuro. El objetivo no era embargarnos por 15 mil millones de pesos, entorpecernos, el objetivo era económico y político, incidir en la política de un gobierno a través del aparato judicial”, planteó.

Y comparó esta situación con el fallo de la Corte a favor de la Ciudad de Buenos Aires por las clases presenciales. “Estamos en medio de una crisis internacional sin precedente y cuando un presidente elegido, en primer vuelta, por una enorme mayoría toma las decisiones que tiene que tomar, que le corresponden, van a la Justicia en intentan parar medidas sanitarias de cuidado de la gente”, dijo. “No van a impedir que cuidemos la salud y la vida de los bonaerense y los argentino”, sentenció, al tiempo que advirtió que “quieren una calamidad sanitaria”. “El lawfare es modificar el curso, las decisiones de un gobierno democráticamente elegido”, insistió.

El programa

La iniciativa, destinada a finalizar la construcción de viviendas cuyas obras han sido paralizadas o abandonadas en todo el país desde el año 2016 y que formaban parte de diferentes planes o programas de viviendas con financiamiento del Estado Nacional, se financiará a través de la Ley 27.613 de Incentivo a la Construcción Federal Argentina y Acceso a la Vivienda, aprobada por ambas cámaras en el Congreso Nacional en febrero pasado.

La inversión estimada para el plan es de 110 mil millones de pesos que desde el Gobierno prevén pueda ayudar a “la reactivación de la economía a partir de los mercados locales de materiales e insumos para la construcción, promoverá la incorporación de mano de obra y la reinserción social y laboral y contribuirá al desarrollo de soluciones habitacionales que mejoren las condiciones de hábitat, vivienda, infraestructura básica y equipamiento comunitario en todo el país”.

“Habían quedado paralizados los sueños de 55 mil argentinos”, admitió el ex intendente de Avellaneda, pero celebró la posibilidad de reactivar las obras frenadas en 2016. “Todos podremos terminas nuestros barrio y darle la casa propia a cada. Sí nos calienta que cada vecino pueda tener una casa, no como ellos que abandonaron y despreciaron al pueblo argentino”, dijo el intendente Secco, en un enérgico discurso con férreas críticas a Mauricio Macri y María Eugenia Vidal.