La ONU mostró “preocupaciones críticas” por los derechos humanos en Formosa


La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, advirtió hoy ante la ONU que la oficina a su cargo tiene “preocupaciones críticas” tiene sobre la gestión de la pandemia en la provincia de Formosa a la que incluyó en una lista de territorios donde debieron intervenir para analizar la situación de lo que definió como “una época de los mayores y más graves retrocesos en los derechos humanos” en todo el mundo.

“En Argentina, el equipo de la ONU en el país se movilizó rápidamente para responder a preocupaciones críticas de derechos humanos en la provincia nororiental de Formosa cuando la pandemia se apoderó de ella”, sostuvo Bachelet al indicar que el Coordinador Residente de la ONU dirigió una misión de evaluación virtual con la participación de UNICEF, UNFPA, OMS / OPS y ACNUDH en la provincia gobernada por Gildo Insfrán.

La ex mandataria chilena contó que su enviado “inició consultas con las autoridades sobre un posible programa estratégico conjunto de la ONU para responder a la emergencia sanitaria en la provincia de acuerdo con las normas internacionales de derechos humanos, que incluye abordar una serie de problemas estructurales, con especial atención a los pueblos indígenas y las poblaciones vulnerables”.

Esta es la segunda ocasión en la que Bachelet se pronuncia sobre la situación de Formosa desde febrero pasado, cuando respondió una carta que miembros de la UCR habían presentado en el que advertían sobre presuntas violaciones de los derechos humanos en Formosa a raíz de medidas contra la pandemia de coronavirus, y señaló que se deben respetar “las salvaguardas contra la arbitrariedad”.

“El cumplimiento de cualquier restricción sobre la libertad de movimiento no puede justificar el recurrir al uso excesivo de la fuerza por parte de la policía; incluso durante estados de emergencia, el uso de la fuerza se rige por los principios de legalidad, necesidad, proporcionalidad y precaución”, respondió en esa ocasión.

“Necesitamos asegurarnos de que todos los actores de la ONU comprendan quiénes son los más marginados y por qué; que identifiquemos conjuntamente los retrocesos en materia de derechos humanos; y que actuemos juntos cuando el apoyo colectivo de la ONU pueda ayudar a los Estados a abordar desafíos clave de derechos humanos, incluidas las desigualdades estructurales”, agregó Bachelet en su disertación de hoy a los miembros del Consejo de Derechos Humanos.

A comienzos de este año, Formosa fue el centro de la polémica, debido al endurecimiento de las restricciones contra el Covid-19, hecho que derivó en diversas manifestaciones, que incluyeron incidentes y represión, y múltiples denuncias por violaciones a los DDHH en los centros de aislamiento que motivaron el viaje de figuras de la oposición, del secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla Corti, y de una misión de Amnistía Internacional para evaluar la situación.

La respuesta de la Cancillería

Por su parte, desde el Ministerio de Relaciones Exteriores partió una aclaración acerca de los dichos de Michelle Bachelet que subrayó que durante el de la comisionada se indicó que “ya se ve en varios países un mejor análisis de los impactos de leyes nacionales y políticas sobre su gente que sufre discriminación, mujeres y programas de Naciones Unidas más enfocados. Da ejemplos de tres experiencias positiva en Camboya, Serbia y Argentina”.

La cartera que comanda Felipe Solá recalcó que Bachelet “destacó que el llamado a la acción da una oportunidad sin precedentes para la asociación a través de Naciones Unidas” y “que el llamado a la acción se sostiene en la necesidad de marcar una sinergia entre lo civil, lo político, lo económico, lo social y lo cultural”.