El temporal generó daños en el aeropuerto internacional de Ezeiza

Se desplomó una lucarna en el hall principal de la Terminal A, pero también hubo daños en mangas.

El fuerte temporal que se desató esta madrugada sobre gran parte de la zona del Gran Buenos Aires provocó una serie de daños en el aeropuerto internacional de Ezeiza, sin afectar las operaciones, según informaron fuentes de Aeropuertos Argentina 2000, concesionaria de la estación aérea.

La tormenta tuvo su pico de intensidad entre las 2 y las 3 de la madrugada cuando los fuertes vientos provocaron la caída de una lucarna (ventana superior del techo) del hall principal de la Terminal A, donde operan la mayoría de las empresas aéreas. Según las fuentes, la caída de la lucarna no provocó daños y no causó lesiones a persona alguna de las que se encontraban en la zona.

También, como consecuencia del viento, se rompieron los vidrios de una de las mangas que se utilizan para abordar o descender de las aeronaves. La manga no sufrió daños y, una vez reemplazados los cristales, se encuentra totalmente operativa.

Un avión de la compañía panameña Copa Airlines, debió desviarse a Montevideo, ya que estaba por aterrizar en momentos en que arreciaba el temporal, pero luego, tras la mejora en las condiciones meteorológicas, retornó desde Uruguay y aterrizó normalmente en Ezeiza.

Las operaciones en el aeropuerto no se interrumpieron en ningún momento y, salvo el lapso de una hora en que el fuerte viento dificultó los despegues y aterrizajes, los movimientos aéreos fueron normales y de acuerdo a los horarios habituales. Esta mañana la actividad se desarrollaba con total normalidad.

En tanto, fuera del edificio del aeropuerto, que alberga a las terminales A y C, se registraron daños de diferente naturaleza, como caída de árboles, un food truck que fue desplazado de su lugar original por la fuerza del viento y la voladura de una carpa que había instalado una compañía de filmaciones, con daños severos en los equipos que se encontraban en su interior. En ningún caso hubo que lamentar heridos.