El conmovedor relato del vecino de Almirante Brown que auxilió a Milena

La mujer estaba a bordo del auto que el domingo chocó contra un poste de luz en Temperley.

choque en temperley

El domingo pasado, un auto chocó contra un poste de luz en Temperley. Una persona resultó herida. Hoy se sabe que es una mujer, es Milena. Un vecino de Almirante Brown se acercó a ella para tranquilizarla mientras aguardaba la llegada de los Bomberos y su familia.

Mientras la jovencita de 18 años lloraba y buscaba en el exterior del auto, reducido a hierros retorcidos, una mirada empática que la ayude a atravesar la dramática situación que vivía, este hombre oriundo de Ministro Rivadavia la vio. Se acercó, le habló a través del vidrio y trató de tranquilizarla.

Ella pedía hablar con su madre, él no se separó de ella un segundo. Incluso, temió por su vida porque un cable del poste lo tocó y le hizo pensar lo peor. Sin embargo, no se movió. Entendió el dolor y la confusión que Milena tenía en ese momento, se quedó hasta que la retiraron del auto y la despidió con voz bajita cuando la ambulancia se la llevó.

Y con el paso del tiempo, decidió contar ese momento en redes sociales. Quizá, Milena lo lea.

Juan Pablo Lopez, el vecino que auxilió a Milena tras el accidente
Juan Pablo Gómez

La conmovedora carta

Yo no estaba en ese auto, pero estuve ahi.

El asfalto mojado, la frenada en sordina y el impacto. Un golpe seco, sin demasiado estruendo, pero bien audible.

No lo ví, solo lo escuché.

Tardé unos segundos en darme cuenta lo que había pasado.

Y corrí.

Corrí sin saber que podía descubrir entre hierros retorcidos, espantando fantasmas en mi mente.

Pero no era tu día, eso me alegró saber cuando te ví.

Fue mi rostro, desconocido para vos, el primero que viste, fue mi voz la que primero te habló, a través del vidrio. Palabras desde una nebulosa, te habrán parecido.

Y no olvido tu mirada de niña buscando auxilio.

Tranquila, te decía.

Y vos llorabas.

Una llamada. Varias.

¿Qué pasó?- me preguntabas.

Asustada y dolorida.

Con mi mamá- dijiste, querías hablar.

Y la puerta torcida que no se abría.

Un cable se soltó, me hizo temer lo peor. Recordé el poste de luz, el ruido de metal, y como una serpiente buscándome los pies, que yo movía. No era de luz. Sentí, entonces,que así como no era tu momento de partir tampoco era el mío.

Otras voces y otras caras se fueron multiplicando.

Sirenas, uniformes.

Me quedaría hasta que llegue tu familia, te prometí. Para darte la mano, acariciar tu cabeza y decirte tranquila.

Y las veces que me alejé, por órdenes que recibía, me mantuve a tu vista.

Mucho oficio, pero escasa humanidad. Eso, yo sentía.

Cuando te sacaron sobre la tabla, te subieron a la ambulancia, con el cuello inmovilizado y con el miedo aún encima, llegó tu familia.

Chau Milena ya está tu mamá, vas a estar bien.

Y desde la camilla, inmóvil, sola todavía, me agradeciste.

Me fuí pensando que Dios iba sentado a tu lado y que la muerte era la que viajaba atrás.

Buena y nueva vida, niña.

Milena tiene 18 años.

Fue el domingo pasado, 11.15 h apróx, en H. Yrigoyen frente al COTO de Temperley. Según una testigo fue encerrada por una Cangoo gris, intentando esquivarla ella maniobró y frenó. El asfalto mojado probablemente hizo el resto.

La utilitaria huyó con su cobardía a cuesta y su humanidad en la guantera.

El choque

El siniestro se registró el domingo en la avenida Hipólito Yrigoyen, a la altura de Pichincha, en Temperley. Se desconocían los motivos del accidente, pero este vecino que se acercó pudo poner blanco sobre negro y precisó que la conductora fue encerrada por otro vehículo y frenó, pero el asfalto mojado provocó que el vehículo continuara su marcha y terminara impactando contra un poste de luz.