El fiscal Guillermo Pérez de la Fuentes -con la colaboración del auxiliar fiscal Francisco Brom- realizará el jueves próximo el pedido de condenas para los policías acusados por el asesinato de Lucas González en Barracas ante el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional Nº25 .
Ya se escuchó el alegato de la querella, durante las últimas dos audiencias, y el juicio oral continuará el próximo jueves a las 9 con el alegato por parte del fiscal.
El abogado de la familia de Lucas pidió que se condene a la pena de prisión perpetua a los tres policías de la Ciudad imputados por el homicidio del jugador de Barracas Central y penas de entre 3 años y medio y 30 años de prisión a otros 11 policías por el encubrimiento del hecho y por torturas.
Gregorio Dalbon, letrado querellante, solicitó la máxima pena para los policías Gabriel Alejandro Issasi (42), Fabián Andrés López (48) y Juan José Nieva (38), por el “homicidio cuádruplemente agravado por haberse cometido con alevosía, placer y odio racial con el concurso premeditado de dos o más personas, abusando de su función o cargo por ser miembro de una fuerza policial” de Lucas, y la “tentativa de homicidio agravado” de Julián Salas (19), Joaquín Zúñiga (18) y Niven Huanca (19).
En la continuidad de su alegato, que había sido suspendido debido a que uno de los codefensores de los tres acusados por homicidio se retiró de la sala la pasada audiencia, Dalbon reiteró que los policías acusados forman parte de la “mafia policial”. “Ustedes (los jueces) van a desbaratar a la mafia de la policía de la Ciudad. Estamos ante un juicio de racismo, de violencia institucional. Quisieron matar a un joven por racismo”, indicó el letrado previo a señalar que las indagatorias realizadas a los 14 imputados formarán parte de su pedido de condenas.
El punto más importante de su alegato se centró en la descripción de los hechos que el abogado dijo tener acreditado y describió a los policías imputados por el crimen como “tres mafiosos asesinos”.
El letrado dijo que los efectivos de la Brigada 6 de la Comuna 4 “vieron bajar a Lucas con una gorrita blanca” y que, en ese momento, “lo eligen por el color de piel”, para luego seguirlos hasta interceptarlos y dispararles “de frente, oblicuo y de atrás, a zonas vitales”. “El agravante por el odio racial debe ser incluido al momento de dar sentencia. Los imputados fueron a la caza y posterior extermino de uno de ellos”, afirmó.
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Los acusaron son el oficial Juan José Nieva, el oficial mayor Fabián Andrés López y el inspector Gabriel Alejandro Issasi, integrantes de la Brigada 6 de la División Brigadas y Sumarios de la Comuna 4 de la Policía de la Ciudad.
Llegaron a debate acusados de “homicidio agravado por haber sido cometido con alevosía, por placer, por odio racial, por el concurso premeditado de dos o más personas y por cometerse abusando de su función o cargo por un miembro de una fuerza policial”; por tres hechos de tentativas de homicidio con idénticos agravantes; por “falsedad ideológica” y por “privación ilegal de la libertad agravada por abuso funcional y sin previsión de la ley”.
Antes de la exposición del abogado Gregorio Dalbón, dos de los policías acusados por el encubrimiento de los hechos decidieron declarar en indagatoria. El comisario Rodolfo Alejandro Ozan -a cargo de la Comisaría Comunal 4 A- explicó lo que quiso decir en un audio que consta en la causa y donde habla de un “mocazo”. “Un tiro de atrás hay que explicarlo, los disparos son en huida, en el audio digo cosas porque es mi forma de hablar, es jerga policial”, indicó. En ese mismo audio, el comisario sostiene que “le volaron el frasco” a la víctima.
Luego, declaró el subcomisario Roberto Inca, de la División Brigadas y Sumarios de la Comuna 4, que discutió lo que el principal Héctor Cuevas -integrante de la Comisaría Vecinal 4D- había declarado en indagatoria hace dos jornadas atrás, cuando aseguró haber visto quien “le había plantado” un arma de juguete al auto en el que iban las víctimas. “Cuevas inventó esta falsedad porque no quiere asumir la responsabilidad que le corresponde”, afirmó Inca.
Cabe recordar que dentro del juicio también figuran como acusados además de Ozán, Inca y Cuevas el comisario inspector Daniel Alberto Santana -jefe de la comuna 4 de la Policía de la Ciudad-; el comisario Fabián Alberto Du Santos; el subcomisario Ramón Jesús Chocobar; los oficiales Sebastián Baidon, Jonathan Alexis Martínez, Ángel Arévalos y Daniel Rubén Espinosa –todos integrantes de la Comisaría Vecinal 4D de la Policía de la Ciudad-; y el comisario Juan Romero. A todos ellos se los procesó por haber alterado “los rastros y pruebas del delito” que habrían cometido los policías que dispararon contra Lucas y sus amigos, y por intentar fraguar el operativo para aparentar que se había tratado de un “enfrentamiento armado”.
El crimen de Lucas González
Lucas y sus amigos fueron atacados a balazos el 17 de noviembre de 2021 cuando salieron de entrenar del club Barracas Central y regresaban a sus casas a bordo de un Volkswagen Suran. En Iriarte y Vélez Sarsfield, los jóvenes fueron interceptados por un Nissan Tiida en el que circulaban tres policías de la Brigada 6 de la Comuna 4 de la Policía de la Ciudad que les hicieron señas para detenerse.
Como no tenían identificación policial, los chicos pensaron que podían ser ladrones e intentaron escapar, momento en que los efectivos les dispararon y un balazo impactó en la cabeza de Lucas, quien murió al día siguiente en el hospital El Cruce de Florencio Varela.
