“Néstor fue el presidente que cambió la historia”

Alberto Fernández encabezó el homenaje en el CCK, al cumplirse 10 años de su muerte. Fue emplazada la estatua que originalmente estaba en la Unasur.

A 10 años de la muerte de Néstor Kirchner, el presidente Alberto Fernández le rindió homenaje con un acto en el Centro Cultural Kirchner (CCK), donde fue emplazada la estatua que originalmente se encontraba en la sede la Unión de las Naciones Suramericanas (Unasur).

“Néstor fue el presidente que cambió la historia. Y mi destino es terminar la obra que él empezó y siguió Cristina. Y les aseguro que lo voy a hacer”. El dueño de estas palabras es el actual Presidente de la Argentina y quien fuera su jefe de Gabinete.

Planteó, retomando los últimos discursos, que continuará la con la tarea que le fue encomendada por el pueblo argentino. “Siento que mi deber es venir a terminar con la tarea que inició Néstor, y que siguió Cristina. Y así lo voy a hacer, y así lo vamos a hacer. Y cada una de las promesas que hicimos en campaña, las voy a cumplir. Vamos a poner de pie a la Argentina como Néstor me enseñó”, sentenció Alberto Fernández.

“En mi vida hubo un antes y después de Néstor. Esa épica, fuerza, coraje y el animarse a enfrentar a todos no es algo usual en la política y yo lo vi en él”, recordó en un tramo de su emotivo discurso en el Centro Cultural Kirchner.

“Néstor hizo cosas que muchos creíamos imposibles de hacer, desde poner una Corte Suprema digna al frente del Poder Judicial hasta terminar con la libertad de los genocidas”, consideró, y destacó también que “Néstor fue capaz de devolverle a todo una generación de argentinos la idea de que la política tenía sentido y que la política era el camino”.

Más temprano, había posteado un mensaje en Twitter, en el horario exacto de la muerte, pasada las 9. “Sé que Néstor, en algún lado está, y lo único que le pido es que siga caminando al lado mío”, concluye el emotivo video.

El Gobierno dispuso la instalación de la estatua del ex mandatario retirada de la sede de la Unasur en Quito en el Centro Cultural Kirchner (CCK), con una caravana denominada “de las mil flores” y colgando en balcones y ventanas posters a modo de homenaje.

Además, el Frente de Todos, que cumple un año de su triunfo en las elecciones, convocó a la denominada “Caravana de las Mil Flores” que se hará en simultáneo en distintas plazas del país desde las 18, y que en la Ciudad de Buenos Aires se concentrará en torno a la histórica Plaza de Mayo.

Néstor Kirchner

Hijo de un trabajador postal descendiente de inmigrantes suizos y de una chilena descendiente de inmigrantes croatas, nació el 25 de febrero de 1950. Cursó los estudios primarios y secundarios en Santa Cruz, pero viajó a La Plata para estudiar abogacía, donde conoció a Cristina Fernández. Se casó y regresó a su provincia, donde tuvieron a Máximo, en 1977, y a Florencia, en 1990.

Inició su militancia en la Federación Universitaria de la Revolución Nacional (FURN) y concluyó su vida como presidente del Partido Justicialista, desde donde fue intendente de Río Gallegos, gobernador de Santa Cruz, presidente de la Nación y diputado nacional.

Llegó a la presidencia de la Argentina en 2003, con el 22 por ciento de los votos y tras la renuncia de Carlos Menem al balotaje. Su gestión, entre ese año y 2007, estuvo marcada por la recuperación de derechos que los argentinos habían conseguido a lo largo de la historia para perderlos en el último tramo del siglo XX, a partir de la instauración de políticas neoliberales.

“Cuando Néstor asumió la presidencia en el 2003, el país había sufrido, dos años antes, una crisis sin precedentes hasta ese momento. Todavía recuerdo aquella magnífica entrevista que Torcuato Di Tella le hiciera y que se publicó como libro bajo el título ´Después del derrumbe´. Perfecta metáfora. El 10 de diciembre de 2019 a la Argentina otra vez la habían derrumbado, pero nadie esperaba, ni siquiera podía imaginar, lo que iba a venir apenas unos meses después”, recordó Cristina Fernández, su compañera y actual vicepresidenta.

Más de cinco años de crecimiento sostenido a un promedio superior al 8,5 por ciento anual; el período más largo de crecimiento de los últimos 100 años; y reducción de la desocupación a menos de un dígito por primera vez después de más de 13 años, pasando del 20,4 por ciento en el 2003 al 8,4 por ciento en el 2007.

Durante su gestión, la Argentina salió del default mediante la restructuración de la deuda por más de U$S 67.000 millones, con una quita del 75% del capital, y la cancelación de la deuda con el FMI, situación que determinó que la deuda externa que en el 2003 representaba el 130% del PBI, en 2007 alcanzaba el 74%.

Tras dejar la Presidencia, se convirtió en el secretario general de la Unasur. “Estamos logrando a partir de la Unasur un espacio en el que podamos convivir aún con situaciones ideológicamente distintas entre los países“, señalaba Néstor en septiembre de 2010, durante una disertación en Estados Unidos. El organismo fue creado en diciembre de 2004 para fortalecer los vínculos entre los países miembro y la definición de políticas en común.

El ex presidente falleció el 27 de octubre de 2010, a las 9.15, en el Hospital Formenti de El Calafate, tras sufrir una descompensación cardíaca que le provocó, según los médicos, “un paro cardio respiratorio no traumático”, del que no pudo salir pese a las maniobras de resucitación que se le practicaron.

La Unasur quedó sin su secretario general, o como dijo el entonces mandatario boliviano Evo Morales, “el primer presidente de Sudamérica en 200 años”. Argentina había perdido a un líder y América Latina a uno de los grandes defensores de la unidad regional contra el capitalismo salvaje. Había forjado una profunda amistad con Hugo Chávez, Lula Da Silva, Rafael Correa y Fidel Castro a partir de la visión compartida de una Patria Grande.

Miles de personas lo despidieron en el Salón de los Patriotas Latinoamericanos de Casa Rosada, las filas kilométricas rodearon la Plaza de Mayo y las inmediaciones durante dos días. Los trabajadores asomados en las ventanas de los edificios y tantísimos otros con paraguas en las calles acompañaron el recorrido del féretro por las calles porteñas hasta que un avión de la Fuerza Aérea lo trasladó a Río Gallegos, donde descansan sus restos.