Organismos de DD.HH. en pie de lucha contra el 2X1 y las domiciliarias

“Vamos a salir a la calle en cualquier momento para parar la mano con esto y seguir batallando para que los genocidas vuelvan a la cárcel”, advirtió Nora Cortiñas a Info Región.

Nora Morales de Cortiñas, Norita, es una de las fundadoras de Madres de Plaza de Mayo, organismo que trabaja desde hace 41 años pariendo memoria y futuro. En abril de 1977, su hijo Carlos fue secuestrado, detenido y desaparecido. Se ha convertido en un emblema de la defensa de  los derechos humanos, junto a otros referentes, y hoy advierte que “en cualquier momento” salen nuevamente a las calles  para “parar la mano” con los beneficios a los represores y genocidas.

El represor Rufino Batalla recuperó su libertad tras cumplir las dos terceras partes de su pena. Había sido condenado a 13 años de prisión acusado de privación ilegal de la libertad -agravada por el uso de violencia y amenazas- y por someter a tormentos a 128 víctimas, más los homicidios de Laura Carlotto y Olga Noemí Casado.

Su caso fue elegido por la Corte Suprema de Justicia para discutir otra vez la aplicación del polémico 2×1. El represor aguardará el fallo de la Corte Suprema, prevista para el 27 de noviembre, en su casa de Formosa. Cortiñas  avisó que “apelando y rechazando la decisión de la Corte Suprema de querer revertir el fallo que se hizo para que no haya más 2×1”. “Es inmoral que sean tratados como si no hayan cometido esos delitos horrendos que cometieron”, analizó.

Reconoció que no es único caso de un genocida liberado y lamentó que “cada vez se descubren más estos casos de genocidas libres o con prisión preventiva”. “Vamos a salir a la calle en cualquier momento para parar la mano con esto y seguir batallando para que todos los genocidas que son liberados estos días vuelvan a la cárcel”, anticipó Norita, con un tono de voz dulce pero fuerte.

Este caso se suma a la cuestionada lista de candidatos a ser beneficiados con la prisión domiciliaria; entre ellos, Alfredo Astiz y Jorge “El Tigre” Acosta. Para Cortiñas, “hay una intención del Gobierno de liberarlos y de ponerlos en una  situación muy cómoda después de los crímenes horrendos que cometieron y que no están en el olvido”.

La liberación de represores es repudiada por los organismos de Derechos Humanos. HIJOS es uno de los tantos que expresó su condena por estos episodios y, de hecho, los militantes volvieron a protagonizar “escraches”. En los últimos días escracharon a Leopoldo Luis Baume, señalado como responsable de la desaparición de Héctor Germán Oesterheld, autor de “El Eternauta”, entre otros, en su casa de La Plata.

Aunque más tarde la decisión fue revocada, Miguel Etchecolatz, ex jefe de la Policía Bonaerense a cargo de los 21 centros clandestinos de detención que funcionaron en la Provincia, había sido uno de esos beneficiados, al igual que Juan Miguel Wolk, ex comisario y jefe del Pozo de Banfield durante la última dictadura cívico-militar. “A 400 mts genocida”, advierten los carteles que emplazan los militantes de HIJOS para señalizar las viviendas de los represores.