La Región aún se encuentra conmocionada por el caso de Zamira, la chiquita de apenas 5 años que era hipoacúsica y en septiembre del 2018 ingresó muerta al hospital Santamarina de Monte Grande. La causa ya fue elevada a juicio y el proceso estará a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9 de Lomas de Zamora.
Son dos los detenidos por el crimen de Zamira: su madre, Brenda Fernández, quien está acusada de “abandono de persona seguido de muerte, agravado por el vínculo”; Brandon González, pareja de la madre, que está imputado por “homicidio con alevosía y ensañamiento”.
“Nosotros queremos perpetua, queremos que paguen, no queremos otra cosa y la verdad tenemos miedo de que la Justicia defina otra cosa y les den menos que una perpetua”, indicó la tía de Zamira, Adriana Libonatto, en diálogo con Info Región.
Un poco de paz. Es lo que espera encontrar el entorno de la nena. “Recién el día de la sentencia final quizá nos traiga un alivio, pero no sé si vamos a estar contentos. Contentos estaríamos si nos devolvieran a Zami pero eso todos sabemos que no se puede”, admitió Adriana, quien se encuentra a cargo de las dos hermanitas de Zamira.
El juicio estará a cargo del TOC 9 de los Tribunales de Lomas de Zamora y aunque aún no hay fecha, está confirmado que será luego de la feria judicial de enero. “Trato de mentalizarme con que la Justicia esta vez va a ser justa para Zami, quiero creer que va a ser así”, concluyó la tía de Zamira.
EL CASO
El 1 de octubre, se hizo pública la detención de Brandon González, acusado de asesinar a golpes a Zamira, una nena de apenas 5 años y sordomuda, en Esteban Echeverría. El día anterior, la madre la llevó al hospital Santamarina de Monte Grande, pero ingresó sin vida. Los médicos alertaron a la Policía porque la nena presentaba golpes.
La autopsia que le practicaron al cuerpo de la chiquita determinó que la causa de la muerte fueron los golpes. “La autopsia indicó que la nena presentaba infiltraciones hemorrágicas en ambos riñones e hígado de carácter traumático”, detallaron desde los Tribunales de Lomas de Zamora. No había indicios de abuso sexual, una de las hipótesis que se manejó en un principio.
