Implementan videoconferencias para que los presos hablen con familiares

En una primera etapa se implementó esta iniciativa en 15 penales del Servicio Penitenciario Bonaerense y en los próximos días se agregarán otras tres.

Frente a la suspensión de las visitas en las cárceles de la provincia de Buenos Aires, para evitar la propagación del nuevo coronavirus (Covid-19), se puso en funcionamiento un inédito sistema de videoconferencias para vincular a privados de libertad con sus familiares.

En una primera etapa se implementó esta iniciativa en 15 penales del Servicio Penitenciario Bonaerense y en los próximos días se agregarán otras tres. Desde este viernes los privados de libertad pudieron mantener comunicaciones con sus seres queridos, y de esta manera suplir de la mano de la tecnología la suspensión de las visitas a los penales debido a la cuarentena por el nuevo coronavirus.

De esta primera experiencia participaron internos de cárceles de Olmos, La Plata, Batán, Florencio Varela, Campana, Dolores, La Matanza, General Alvear, Bárker, Bahía Blanca, Saavedra, Junín, Trenque Lauquen, San Nicolás y Sierra Chica.   En los próximos días se sumarán penales de San Martín, Urdampilleta y Magdalena.

La selección de los privados de libertad que participaron de las videoconferencias fueron realizadas por los profesionales del área de asistencia social de las Unidades Penales  desde donde se contemplaron las dificultades de salud de los familiares de los internos o el periodo extenso de tiempo sin visitas por las largas distancias que debieron transitar por vivir en localidades alejadas a las cárceles.

El programa fue impulsado por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires y sirve de apoyo al Protocolo de Contención Psicológica, donde los especialistas indicaron que algunas de las respuestas esperables ante la crisis sanitaria pueden ser miedo intenso, ansiedad, angustia, pánico, temor al contagio, indefensión, incertidumbre, irritabilidad y enojo, así como también recuerdos de vivencias traumáticas anteriores, falta de concentración y dificultades para conciliar el sueño, por lo que el mantenimiento del vínculo con sus familiares contrarresta las disfunciones mencionadas.

Esta modalidad de comunicación estará a disposición de las autoridades penitenciarias para cada ocasión que se requiera y mientras dure el aislamiento social obligatorio por la pandemia del Coronavirus.